FRIGOPIE
Toni Acosta es la Reese Witherspoon de «Mujeres del (h)ampa». Por su implicación en el proyecto. Al menos por la introducción de Carlos del Hoyo en Mandarina, que le encargó una comedia. Pero no, «Mujeres del (h)ampa» no se parece a «Black little lies». Aunque alguien despreciable muera por causas no naturales. La serie que anoche estrenó Telecinco tiene mucho más de «Mujeres», de Dunia Ayaso y Félix Sabroso. Y otro tanto de «La comunidad», de Álex de la Iglesia. Es divertida, burra y con gente corriente. Como «La que se avecina», a la que sustituye (marronazo).
Y claro que puede recordar a «Mujeres desesperadas» (las nuestras serían mujeres sobrepasadas). Y claro que el momento en que el personaje de Toni Acosta se masturba viendo a David Cantero recuerda a Phoebe Waller-Bridge haciéndolo con Obama. Pero de eso se trata, incluso en los objetos de deseo «Mujeres del (h)ampa» es muy española. La creación de Carlos del Hoyo y Abril Zamora presenta a mujeres normales que se ven en una situación extraordinaria. Unas mujeres vulgares y ocupadísimas que llaman a sus hijas chinas Mari Carmen, huelen lejía (¿huelen lejía?), tienen platos de Duralex y entre la conciliación familiar deben incluir deshacerse de un cadáver.
La niña mala se come un Frigopie mientras hace maldades. Su madre, interpretada por Amparo Fernández, es tan desagradable aquí como en «Acacias 38», donde hace de Susana.
Mayte (Toni Acosta) tiene el peor trabajo. Vende un robot llamado TurboThunder 3000 que tiene mucho que ver con la trama. También tiene los peores hijos. Una adolescente insoportable y un niño tan ceporro como abusón. Maltrata a un tal Roberto Morato. «¿Al mariquita?», pregunta Mayte al profesor. «Si nunca ha visto homofobia en casa. Si su tío ha hecho patinaje artístico». Candela Peña se ha hecho la dueña de «Hierro» y Toni Acosta se ha hecho la dueña de «Mujeres del (h)ampa». El peor trabajo, los peores hijos, el mejor papel. Y no es que las otras no estén estupendas, pero ella lo está más. Ah, el niño acosado se llamaba Roberto Maroto, pero Telecinco prefirió cambiar el apellido.