El Gobierno ningunea al Congreso: un decretazo cada diez días en 2020
∑Sánchez bate el récord▶ 37 decretos-ley firmados este año. Pero el Covid no es la excusa. Lleva 78 desde que asumió el poder en 2018▶ uno cada doce días
Podría decirse que Pedro Sánchez ha estado gobernando a golpe de decreto obligado por las terribles urgencias de la pandemia sanitaria, pero no es exactamente así. El presidente ejerce con fruición la función del legislador desde que fue investido la primera vez, tras la moción de censura a Rajoy. El ritmo de leyes dictadas por el ejecutivo al legislativo es trepidante. Solo este año se han firmado 37 decretos-ley, a la espera de si cae algún otro en el último Consejo de Ministros de mañana. La media de 2020 es de un decretazo cada diez días (9,6). Un récord absoluto. Pero el Covid no es la excusa. Sánchez lleva 78 decretazos desde que asumió el poder en junio de 2018▶ uno cada doce días. El ninguneo al Parlamento ha sido continuo.
Todos los gobiernos de la democracia han recurrido al real decreto ley para sacar adelante su tarea. Esta figura legislativa está prevista en la Constitución (artículo 86) para facilitar que el Ejecutivo pueda hacer frente a situaciones sobrevenidas, «de extraordinaria y urgente necesidad», sin tener que pasar antes por el Parlamento. Es un procedimiento ágil, acelerado, que reduce el papel del Congreso a la mera derogación –o rechazo– del decreto que sale de Moncloa. La Cámara
Baja lo vota en un plazo de treinta días tras ser publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y habiendo entrado ya en vigor.
No hay deliberación previa, como mucho una invitación a legislar después convirtiendo el decreto en un proyecto de ley. El Ejecutivo haciendo de legislativo. Diecinueve de los 37 decretazos de este año debían concretarse con la aportación de los grupos parlamentarios, pero nueve se han quedado en el cajón, según denuncia el PP, que acusa al Gobierno de tener «amordazado» al Parlamento. Vox ha registrado una moción en el Congreso de los Diputados para censurar el ejercicio fraudulento de esta figura que vacía de competencias al legislativo.
Pedro Sánchez es, con diferencia, el presidente que más inclinación tiene a gobernar a golpe de decretazo. El actual líder del PSOE acumula 78 decretazos en tan solo dos años y medio en Moncloa, lo que arroja una media anual de 31 decretos-ley. Y eso que en 2019 fue interino, por la repetición electoral. Su marca personal cuadruplica los registros de Felipe González (de media, ocho decretos al año) y dobla a Mariano Rajoy y Aznar (ambos firmaron 16 por ejercicio). Zapatero es quien menos recurrió a esta fórmula▶ trece leyes anuales dictadas desde La Moncloa.
Sánchez tiene además el dudoso honor de ser el único presidente de la democracia al que el Congreso le ha rechazado dos decretos-ley. Solo ha ocurrido cuatro veces en nuestra etapa democrática. La Cámara denegó el plácet a Zapatero para tocar el impuesto sobre las labores del tabaco (2006) y a Rajoy por la reforma de la estiba (2017). Pero el revolcón a Sánchez ha sido aún mayor. Sufrió en septiembre la rebelión de los alcaldes, que no aceptaron que Hacienda se quedara con su superávit a cambio de financiación extraordinaria en la pandemia. Previamente, en enero de 2009, Podemos votó en contra del decreto-ley del Gobierno socialista sobre los alquileres.
Pablo Iglesias denunció entonces el tic socialista de parir leyes por la vía de la imposición, sin consensuar con el resto de la Cámara. Ahora forma ya parte del Gobierno que más decretazos firma.
Año récord
La coalición se estrenó con sus «martes sociales»▶ dictó subidas de las pensiones y retribuciones del sector público y derogó por decreto el despido objetivo por faltas de asistencia al trabajo. Aunque sin duda la mayor concentración de decretos-ley tuvo lugar durante el estallido en España de la crisis sanitaria. Desde el 10 de marzo y hasta el final del primer estado de alarma en mayo, Moncloa aprobó 18 decretazos. Dominaron las medidas urgentes para paliar los daños económicos y sociales de la pandemia, incluida la regulación en materia laboral por el parón forzoso del país en el confinamiento. Pero en ese vendaval se colaron de rondón algunas disposiciones no urgentes, como la inclusión del vicepresidente Iglesias en la sala de control del CNI. El Gobierno también sorteó al Congreso para aprobar una medida de largo alcance▶ el Ingreso Mínimo Vital. Era el mes de mayo aunque su aplicación sigue teniendo grandes lagunas. La medida no llega.
La semana pasada, el Consejo de Ministros aprobó tres decretos▶ incluido el de los desahucios y el que agilizará la asignación de los fondos europeos, aunque este último aún no ha sido publicado en el BOE. En la lista, denuncia Vox, se incluyen cuestiones tan variopintas como la Orquesta Nacional.
Numerosos juristas han denunciado esta práctica, al considerar que se difumina la separación de poderes y se invade la competencia del Congreso. El expresidente Felipe González también ha censurado a Sánchez por el uso abusivo de esta figura legislativa▶ «No vale porque no es una buena regla de convivencia».
Ritmo anual En la media anual, Sánchez duplica a Rajoy y a
Aznar, y cuadruplica a
González
2012
Rajoy aprobó 29 decretazos en el año del rescate. «Es un atentado a la democracia», criticó el PSOE