Descartan la avería eléctrica en el incendio de la residencia
La mañana no disipó la pesadilla que la noche anterior se había desatado en el interior de la residencia de ancianos Adorea-Domus VI en Sevilla. Por las ventanas del edificio se ven aún los restos del infierno que se vivió en el interior de las instalaciones y que deja por ahora un saldo terrible de una anciana de 89 años muerta y 21 residentes enviados al hospital, cinco de ellos con pronóstico grave. Si bien, desde el hospital Virgen del Rocío confirmaban ayer por la tarde que ya están dando las primeras altas y que los pacientes con peor pronóstico están evolucionando favorablemente. Tras el trabajo de los servicios de emergencia ahora toca el turno de la investigación.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se hizo cargo de un caso cuyas diligencias han recaído en el juzgado de Instrucción nº 10 de Sevilla. Los agentes de la Policía Científica aún
a evacuarlo, empleado gas pimienta y bombas de humo. Una mujer, herida en la cabeza, cubierta de sangre y al parecer inconsciente, fue evacuada en una camilla. Según los servicios sanitarios, se halla en estado crítico tras recibir un disparo en el pecho.
Riesgo de violencia
La alcaldesa de la capital declaró inmediatamente el toque de queda para el anochecer, ante el riesgo de violencia. La noche del martes ya hubo violentos disturbios en la capital de EE.UU., con enfrentamientos entre partidarios del presidente y la policía metropolitana. Hubo al menos una decena de detenidos. En la noche del miércoles se iban a desplegar unos 1.100 reservistas de la Guardia Nacional de Washington.
Una gran parte de esos manifestantes acudió al Capitolio después de haber escuchado el discurso de Trump ante la Casa Blanca, en el que el presidente denunció de nuevo fraude y prometió seguir peleando por mantenerse en el poder. Al llegar a la sede del poder legislativo, lo rodearon y forcejearon