Kim promete más armas nucleares si Biden no «dialoga»
El dictador de Corea del Norte afirma que EE.UU. sigue siendo su
electo de EE.UU. ya ha prometido que, sin condiciones previas, no se reunirá con Kim Jong-un, a quien ha llamado «matón» y «dictador». En respuesta, Kim le exige que «la clave para establecer nuevas relaciones» entre ambos países «reside en la retirada de la política hostil de EE.UU.».
Autocrítica insólita
Hasta que eso ocurra, vuelve a abogar por el desarrollo de su programa nuclear y la mejora de sus misiles de alcance medio e intercontinentales, que tienen a Japón y EE.UU. en el objetivo. «Es necesario fabricar armas atómicas más pequeñas, ligeras y tácticas y seguir impulsando la producción de cabezas nucleares supergrandes», ordenó el joven dictador. Entre sus objetivos, destacan la construcción de un submarino nuclear y de misiles intercontinentales que puedan ser disparados desde lanzaderas móviles o incluso bajo el agua, así como cohetes hipersónicos y satélites militares de vigilancia. A pesar del belicismo de su discurso, aseguró que Corea del Norte no usaría dichas armas a menos que fuera atacada por «fuerzas hostiles». De igual modo, intentó recuperar el diálogo con el presidente surcoreano, Moon Jae-in, interrumpido desde el fracaso de la cumbre con Trump en Vietnam en febrero de 2019.
Hace cinco años, cuando Kim retomó los congresos, anunció ante sus casi 3.500 delegados la política «Byongjin» de desarrollo económico y nuclear. Este año, y con el país más cerrado que de costumbre por el coronavirus, ha reconocido su fracaso por el impacto de los tifones que han destrozado los cultivos y de la pandemia, que ha cortado el comercio con China que había traído cierta mejora económica.