Garamendi pide a su directiva que se pronuncie sobre el veto al despido
La patronal decide mañana si sella un pacto tras negarse el Gobierno a reducir las multas por extinción
que no ha sido así», dice Ángel Martín responsable global de Restructuring de KPMG. A su juicio, la banca hace bien echando el resto por las refinanciaciones, aunque las empresas, señala, deberían pensar también en tomar más decisiones▶ «Todo proceso de refinanciación financiera debe llevar aparejado otro de refinanciación operativa. Ajustar costes a demanda».
Asimismo, las fuentes consultadas apuntan a que España se ha quedado muy rezagada en la previsión de las insolvencias. El Gobierno no ha pensado en ello, y las empresas también son reticentes. Sin embargo, en países como Reino Unido y Estados Unidos, así como los nórdicos, esta fórmula se ha demostrado exitosa al haberse realizado desde un momento temprano.
Agrupación de créditos
Más allá de las empresas, la banca también viene potenciando las refinanciaciones y agrupaciones de créditos de los particulares. A esto último se dedica Agencia Negociadora, que no duda en afirmar que en este aspecto los bancos tienen un negocio de 1.500 millones de euros.
En todo caso, desde esta entidad señalan que los bancos no aceptan este tipo de operaciones en todos los casos, sino que ha de tratarse de clientes solventes que deciden atajar sus problemas a tiempo. Y, en este sentido, las fuentes consultadas señalan que todo apunta a que, quizás, los que lo tendrán más complicado para refinanciar y agrupar créditos serán los trabajadores empleados en los sectores más dañados por la crisis. En este sentido, según sus cifras, las solicitudes de este tipo de operaciones crecieron un 19% en el primer estado de alarma; un 17% en los dos primeros meses de verano; y un 10% en el último trimestre de 2020. La tendencia para los particulares, así como para las empresas, es clara, con un ratio de aceptación por parte de la banca del 75%, lo que supone un incremento del 50% respecto al periodo previo al Covid.
La tercera ola y las restricciones que adopten los distintos gobiernos para contenerla pueden ser la gota que colme el vaso. Porque impactará de nuevo sobre los sectores que ya habían sido los más castigados previamente, como la hostelería, el comercio o los alojamientos hoteleros, y que más cerca están de la quiebra. Las estadísticas de empleo ya dejaron negro sobre blanco el impacto de la segunda ola en materia laboral, haciendo subir las personas acogidas a un ERTE. La curva de personas en ERTE fue descendente hasta el mes de octubre, cuando alcanzó su mínimo de 706.000 personas reguladas bajo estos esquemas, pero volvió a subir después en 49.000 personas como consecuencia de las restricciones impuestas para luchar contra la segunda ola. Una tormenta perfecta que la banca, esta vez, puede ayudar a contener.
Empieza una semana crucial para el empleo. Los órganos de gobierno de patronal y sindicatos deberán dar mañana sus bendiciones para que una nueva prórroga de los ERTE hasta el 31 de mayo se produzca con acuerdo. Un consenso que aún no ha sido posible después de que el Gobierno se negara a la petición empresarial de flexibilizar el despido y mantuviera, por tanto, la exigencia de mantenimiento del empleo. Es decir, que cuando una empresa incumple dicho compromiso y despide a alguno de sus trabajadores antes de los seis meses pactados debe devolver todas las exoneraciones de cotizaciones que ha recibido durante el ERTE por toda la plantilla.
Es el último escollo que salvado permitirá cerrar una cuarta prórroga de los ERTE. Hay sintonía en las fechas y también en que las empresas puedan cambiar de tipo de expediente de forma automática. Así, el paso de un expediente de fuerza mayor a otro por impedimento o limitación de la actividad, o viceversa, podrá realizarse sin tener que volver a tramitar un nuevo expediente. Una modificación que habían reclamado los agentes sociales y que permitiría agilizar los expedientes y evitar un nuevo colapso administrativo, que sigue provocando atrasos en los pagos de prestaciones. Los ERTE quedarían, por tanto, prácticamente como están en la actualidad, manteniéndose las exoneraciones en las cuotas en las mismas condiciones.
Los órganos de dirección de UGT y CC.OO. revisarán el último texto del Gobierno también mañana y, además, anuncian el alcance de las protestas contra el Ejecutivo para reclamar
Autónomos ATA exige hoy al Gobierno que exonere de cuotas a los autónomos con limitación en actividad, horario y aforo
un aumento del salario mínimo y derogar la reforma laboral y la de pensiones. Otras reivindicaciones sindicales son la firma de un nuevo acuerdo de convenios con la patronal, la regulación de las plataformas digitales, la Ley de Igualdad Salarial y un plan de choque contra la siniestralidad. La paz social ya no está asegurada y en esta batalla Podemos está del lado sindical, lo que anticipa otra fractura en el Gobierno.
Pero antes, hoy, las organizaciones de autónomos se reunirán con la Seguridad Social para pactar una nueva prórroga del cese de actividad. ATA pedirán al Ejecutivo que exonere de la cotización a todos los autónomos afectados por las restricciones, ya sea con limitación de actividad, horario o aforo.
Además reclamará que las ayudas se prorroguen de forma automática, especialmente ahora «que estamos inmersos en una tercera ola y nuevas restricciones», asegura el presidente de ATA, Lorenzo Amor.
Otras de sus reivindicaciones será permitir que los autónomos de temporada que en 2018 o 2019 hayan cotizado en meses diferentes de junio a diciembre accedan a las ayudas y aplazar la subida de cuotas prevista para este año.
Movilizaciones Los sindicatos detallan esta
semana el alcance de las protestas contra
el Ejecutivo