El último cameo del «procés»
El abogado y exmosso Josep Asensio ha trufado el proceso independentista con sus «apariciones» judiciales
El intrincado laberinto de aplazamientos, recursos y resoluciones judiciales en que transita el «procés» desde hace días tiene detrás un nombre propio▶ Josep Asensio. Prácticamente desconocido para el conjunto de la opinión pública y la prensa política, resulta sin embargo un viejo conocido de quienes siguen con mayor detenimiento los meandros de esta gincana jurídica que ha acabado siendo el proceso independentista catalán.
Asensio, un exmosso retirado que consagró su vida a las leyes tras dejar un Cuerpo en el que sirvió más de 20 años, acumula en su haber varios «minutos de fama» relacionados con sus recursos y piruetas en los tribunales. La más reciente, y una de las más reseñables, ha sido lograr que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) hiciera caso a su petición a título particular y tumbara el decreto de la Generalitat que anulaba las elecciones del 14 de febrero. Así las cosas, si los catalanes acaban votando el segundo domingo el mes que viene, es más que probable que sea debido a la pericia de este viejo agente que colgó el uniforme para enfundarse dentro de una toga.
«Yo sólo he ejercido los derechos que la legalidad me otorga. Interesa que la ciudadanía sea cuanto más mema mejor, así ejercerá menos sus
Josep Asensio, en los platós de TV3 derechos». Con esta soltura defendía esta semana Asensio su recurso ante los micrófonos de Rac1. Preguntado por sus motivaciones, el letrado destacaba que no tenía detrás a ningún partido y criticaba con dureza la «incongruencia»
Apariciones
El letrado alzó su voz en el 9-N, tras la detención de los presos del 1-O y la destitución de Puigdemont
de postergar las elecciones siguiendo argumentos sanitarios mientras, por ejemplo, el Metro sigue llenos de personas y la vida continúa en ámbitos como la educación. «La ilegalidad del decreto es patente. Cualquier ciudadano puede recurrir porque es un acto administrativo», aseveraba con una seguridad y soltura que revelaban su comodidad ante el interés mediático.
De hecho, casi cada capítulo del «procés» ha contado con un cameo del abogado Asensio. En 2014, el letrado presentó una querella contra el clan del expresidente Jordi Pujol para averiguar el origen de su fortuna. Poco después, se plantó con su hermana Marta en los estudios de TV3 para asegurar que habían encontrado un camino para lograr en los tribunales que se pudiera celebrar la consulta independentista del 9-N, organizada por Artur Mas en 2014. «Hemos visto una luz dentro de este túnel de oscuridad al que nos han llevado los políticos», prometían en ese momento los Asensio ante las cámaras de la televisión autonómica mientras la presentadora recitaba una letanía indescifrable de recursos, apelaciones y atajos procesales.
Apenas tres años después, este abogado licenciado en la UNED volvía a protagonizar titulares al presentar una querella por prevaricación (posteriormente archivada) ante el Supremo contra la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela a raíz por su decisión de enviar a prisión preventiva a los consejeros responsables del referéndum ilegal del 1-O. Asensio también llamó a la puerta del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) para denunciar la destitución de Carles Puigdemont y su gobierno con el artículo 155. Con su última incursión en el «procés», este «policía abogado» cambia de bando y deja por una vez de lado su defensa del independentismo para plantar ahora cara al Govern.