Hartazgo de los catalanes
Abstención en la elecciones autonómicas catalanas
En porcentaje sobre el censo electoral y en número de abstenciones
2017
2021
Resultados de Ciudadanos
En número de votos y escaños
1.109.732 apuntan a que el incremento de la abstención ha desgastado más al constitucionalismo, su incidencia en ambos bloques tiene matices. Colomé incide en que, en el lado independentista, es la CUP, y en el constitucionalista Vox, quienes «crecen y retienen» apoyos al tener un electorado más «fiel». Añade Michavila otra característica que contribuyen a sus buenos resultados▶ fueron las mujeres quienes más se abstuvieron el domingo por la pandemia y Vox y la CUP son quienes cuentan con una base electoral más masculina. Además, la abstención fue mayor en la gente de más edad.
Un millón de votos menos
En lo que todos los sociólogos coinciden es en que el electorado que más se abstuvo el 14-F ha sido el que en 2017 había apostado por Ciudadanos. El partido naranja se había impuesto en aquellas elecciones con 1.109.732 votos, 36 diputados que no le sirvieron para formar gobierno. Tres años después, la debacle es absoluta▶ solo 157.903 votos y seis escaños. Un millón de votantes le han dado la espalda.
Las razones son múltiples, empezando por la nefasta gestión del partido de su victoria electoral de 2017. El voto de Ciudadanos de aquellas elecciones era, de alguna manera, prestado, sobre todo de electorado tradicional del PSC y del PP, que confiaron en la beligerancia del partido naranja para frenar el desafío del ‘procés’. ¿Qué ha pasado ahora con ese voto? Una parte, desde luego, ha vuelto al PSC, al calar que Illa podría ser el ‘caballo ganador’ frente al separatismo. Otro porcentaje, el más identitario y emocional, ha contribuido al éxito de Vox. Pero una buena parte, como explicaba Colomé, simplemente se ha quedado en casa. Aunque los nacionalistas de palabra no renuncien a la independencia, muchos constitucionalistas la ven irrealizable y han dejado de percibirla una amenaza real. Votantes que en el pujolismo no sentían gran apego por los asuntos autonómicos, pero que luego se movilizaron para combatir el ‘procés’, parecen haber relajado su interés por las elecciones catalanas.