Puerto Rico urge a EE.UU. a que lo acepte como un estado más
El gobernador espera que el Congreso trate la incorporación de
51º estado, las posibilidades son más altas que nunca.
Así lo ha defendido el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, que ha asegurado que espera que el Congreso introduzca legislación para la incorporación de la isla como estado a mediados de marzo. «El Congreso está obligado moralmente a responder», ha dicho en una entrevista en Axios, en referencia al resultado del referéndum.
El apoyo a la incorporación ha crecido en la isla en los últimos años, después de que Trump fuera combativo en la concesión de ayuda a desastres naturales como el huracán María –que arrasó la isla en septiembre de 2017– y tras años de mala gestión y de deuda pública astronómica por las autoridades locales.
Consecuencias políticas
La admisión de Puerto Rico tiene altas repercusiones políticas. Los dos grandes partidos, demócratas y republicanos, han defendido el derecho del país caribeño a convertirse en estado, pero hay voces internas que lo desaconsejan, en especial entre los conservadores.
Puerto Rico tendría dos senadores, como el resto de estados, y un número de diputados –cuatro– proporcional a su peso demográfico. Con las fuerzas políticas muy parejas en Washington, algunos republicanos creen que la incorporación solo beneficiaría a los demócratas. La exsenadora Martha McSally aseguró el año pasado que con Puerto Rico los republicanos «nunca recuperarán el Senado». Y su líder en la cámara alta, Mitch McConnell, calificó el apoyo a su incorporación como parte de la agenda radical de los demócratas.