Exonerado del ‘impeachment’, Trump ya planea su regreso
El expresidente está colocando a allegados y a familiares para
¡No hay nada que no podamos lograr juntos!», añadió.
No hay planes concretos aun, pero fuentes de su equipo en la residencia de Mar-a-Lago, que antes trabajaban en la Casa Blanca, aseguran que el presidente sólo está tomándose un respiro y que prepara «varios actos» para volver a conectar con sus partidarios. Es sabido lo a gusto que se encontraba Trump en esos multitudinarios mítines. El último fue ante la Casa Blanca, el 6 de enero, momentos antes que una turba de partidarios suyos saqueara en Capitolio y provocara la muerte de siete personas, cinco en el acto y dos por suicidio después. Fue el discurso que propició el «impeachment», ya que invitó a sus partidarios a marchar al Capitolio.
Candidatas a senadora
Los Trump también comienzan a tomar posiciones. La hija mayor del expresidente, Ivanka, ha sonado en los medios políticos estadounidenses como posible candidata a primarias para el Senado en Florida. La nuera, Lara, casada con su hijo Eric, se plantea presentarse a un escaño del Senado en Carolina del Norte, donde nació, según reveló el domingo el senador de Carolina del Sur y aliado de Trump
Lindsey Graham. Los allegados del presidente además están animando a un estrecho colaborador suyo, Richard Grenell, a que se presente a las primarias a gobernador de California, el estado donde vive.
En cualquier caso, gracias a su exoneración, Trump no ha sido inhabilitado y tiene vía libre para hacer lo que quiera. Es cierto que una mayoría del Senado votó a favor de condenarle (48 demócratas, dos independientes y siete republicanos, que suman 57 de un total de 100) pero se necesitaba para ello dos tercios. Tampoco es que las relaciones del expresidente con los líderes republicanos hayan quedado en buen lugar. El líder conservador en el Senado, Mitch McConnell, dijo en el pleno el sábado que votó a favor de exonerarle solo por cuestiones de procedimiento, y que en cualquier caso el expresidente aun puede rendir cuentas por sus acciones ante las cortes de justicia.
A Trump le acusaron los demócratas de incitar a la insurrección en el saqueo del Capitolio, para perpetuarse en el poder por la fuerza. Es el único presidente en la historia sometido «impeachment» dos veces, además en un solo mandato. En las elecciones de noviembre le votaron más de 74 millones de personas, 11 millones más que en 2016. El presidente sigue sin aceptar que perdió las elecciones, y aunque no tiene una sola demanda abierta (todas fueron desestimadas) sigue aferrado a la noción de que en los comicios hubo un fraude a gran escala en su contra.