Europa agiliza la llegada de vacunas de segunda generación
Más de 22 millones de europeos han recibido ya una dosis de las vacunas contra el Covid-19 y cerca de 8 millones las dos dosis completas. Las cifras están lejos de lo que se pretendía al inicio de la campaña de vacunación y la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, confía en que los laboratorios acelerarán la entrega de nuevas dosis en los próximos días. Pero además de eso, ayer presentó una nueva propuesta para crear un marco de cooperación públicoprivado, que ha bautizado como ‘HERA’, con el que pretende asegurar no solo acelerar la producción de vacunas si son necesarias para combatir nuevas variantes del virus, sino preparar a la Unión Europea para eventuales crisis sanitarias en el fu
turo con una estructura industrial y farmacéutica más eficiente.
La propuesta que fue aprobada ayer por la Comisión en la reunión semanal de los comisarios será presentada a los jefes de Estado o de Gobierno que celebrarán una reunión del Consejo Europeo por videoconferencia el jueves 25 de febrero. Según explicó la presidenta, se trata de reforzar los canales de coordinación entre la industria, el sector sanitario y las autoridades públicas. «Unir esfuerzos para adelantarnos a la evolución de la curva en futuras fases del virus desde la identificación de variedades a creación de nuevas vacunas. La buena noticia es que tenemos información y experiencia. Ya sabemos dónde han surgido estrangulamientos y retrasos en la producción» para tratar de evitar que se reproduzcan en el futuro.
Las futuras vacunas
Los puntos más importantes de este plan incluyen las ayudas a los estados miembros para que lleven a cabo más análisis de secuenciación genómica del coronavirus y detecten más rápidamente nuevas variantes del virus y el grado de propagación entre los ciudadanos. Y por otro lado, modificar las reglas de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) para que los procedimientos de autorización de las futuras vacunas contra las variantes del virus puedan seguir el mismo procedimiento que con las que se hacen cada año contra la gripe común y sus distintas cepas. Es decir, que las vacunas de nueva generación sean consideradas no como productos nuevos, sino derivados de los ya aprobados. También se renovarán los modelos de contrato que se han firmado con los laboratorios, para asegurarles la estabilidad financiera con la garantía de futuras adquisiciones.
En este sentido, la Comisión firmó ayer un nuevo contrato con Moderna para asegurarse la entrega de 300 millones de dosis adicionales de la vacuna, la mitad de ellas para ser entregadas este 2021.
Un equipo internacional de investigadores ha logrado recuperar el ADN de los dientes molares de tres mamuts enterrados en el permafrost del noreste de Siberia, dos de los cuales vivieron hace más de un millón de años. Se trata del ADN más antiguo jamás secuenciado, superando en cientos de miles de años al que hasta ahora ostentaba el récord, el de un caballo de entre 560.000 y 780.000 años de antigüedad hallado en el Yukón (Canadá) en 2013. El hallazgo, dado a conocer ayer en la revista científica ‘Nature’, demuestra lo lejos en el tiempo que pueden viajar las nuevas técnicas de secuenciación del genoma. Además, revela algunas sorpresas en la historia evolutiva de estos animales, incluido un linaje desconocido hasta ahora.
Los científicos, dirigidos por el Centro de Paleogenética en Estocolmo (Suecia), analizaron los genomas de tres mamuts de 700.000 a 1,2 millones de años a partir de unos dientes excavados por científicos rusos en los años 70 en depósitos de permafrost, el suelo permanentemente congelado, de diferentes zonas de Yakutia, en Siberia. Extraer el ADN resultó todo un desafío.
Para empezar, como explica a este periódico David Díez del Molino, biólogo evolutivo y uno de los autores principales del estudio, hacen falta billones de secuencias para recuperar una pequeña fracción y diferenciarla de los genes contaminantes de bacterias, microbios, plantas e incluso humanos que hayan manipulado las muestras. Además, «al ser tan antiguo, el ADN se encuentra muy degradado y es muy escaso –señala–, lo que resulta un problema a la hora de ensamblar el genoma».
Dos especies distintas
La edad de los restos se determinó con la ayuda de datos geológicos y el reloj molecular. Los análisis mostraron dos linajes diferentes de mamuts durante el Pleistoceno temprano. El ejemplar de 700.000 años, bautizado como ‘Chukochya’ –los tres recibieron el nombre de los ríos cercanos a donde fueron encontrados–, representa uno de los primeros mamuts lanudos conocidos. ‘Adycha’, de 1,1 millones de años, es un ancestro suyo, mientras que el especimen más antiguo, bautizado como ‘Krestovka’, pertenecía a un linaje genético previamente desconocido que se separó de otros mamuts siberianos hace más de dos millones de años.
«Esto supuso la mayor sorpresa», reconoce Love Dalén, profesor de Genética evolutiva y también autor principal del estudio. Hasta ahora se creía que solo había una especie de mamut en Siberia en ese momento, llamado mamut de la estepa. Pero los análisis mostraron «dos linajes genéticos muy diferenciados, uno que corresponde con ‘Krestovka’ y el otro con ‘Adycha’. Creemos que estos dos mamuts podrían ser especies distintas pero es pronto para estar seguros», dice Díez del Molino.
Los investigadores también sugieren que fueron los mamuts que pertenecieron al linaje de ‘Krestovka’ los que colonizaron América del Norte hace 1,5 millones de años. Además, los análisis muestran que el mamut colombino que habitó las praderas americanas durante la última edad de hielo era el fruto de una hibrida
El linaje de los mamuts