ABC (Andalucía)

El apaciguado­r eterno

La alternanci­a política no puede con él. Francisco Ocaña lleva cuatro décadas como juez de paz de Cádiar (Granada)

- CARLOS LANDA

En Cádiar, pueblo de la Alpujarra granadina vive desde hace 89 años Francisco Ocaña Ortega, segurament­e el juez de paz más longevo del país. Paco, como gusta que le llamen, imparte conciliaci­ones desde 1980 en el municipio y sus anejos, donde habitan poco más de 1.600 almas. Este hombre amable, respetuoso, comprometi­do con su pueblo y su trabajo, dueño de una voz ronca y vigorosa no acorde con su edad, es el eterno apaciguado­r de la comarca. El Ayuntamien­to pretende rendirle un homenaje, pero Paco no quiere, por ahora. «Hasta que no pase la pandemia y estemos todos vacunados, no es momento de homenajes ni de fiestas», asevera. Su nombramien­to fue refrendado hace un año, y él solo piensa en impartir paz en su pueblo «hasta que el cuerpo aguante o Dios quiera».

Francisco Ocaña nació un 24 de diciembre, en una noche de paz que parece haberle acompañado toda su vida, incluso en el cometido que ejerce desde hace 41 años. «Normalment­e soy tranquilo, la verdad. Pero también algo inquieto. Por la mañana me levanto y hago gimnasia y me doy mis paseos para mantenerme en forma para cumplir con las cuatro o cinco horas en la oficina haciendo trámites; he de estar en forma», asegura.

Antes de ser juez de paz fue concejal durante 25 años, «siempre buscando soluciones y mejoras para el pueblo, desde pedir que nos instalasen el teléfono, algunas infraestru­cturas, mejoras en las carreteras, cartas y cartas a los periódicos pidiendo cosas para el pueblo y la comarca».

Y desde los 17 años, también, al frente de una tienda de tejidos que ha mantenido junto con su hermano José. Su otro hermano vive en Sabadell. Los tres vástagos de un matrimonio formado por el maestro del pueblo, el recordado Francisco, y su madre María Gracia, sobrina del obispo de Granada y Tarazona en esa época del siglo pasado, Manuel Hurtado, fundador de la Consagraci­ón Siervas del Evangelio.

Bodas «internacio­nales»

A Paco Ocaña le gusta «tener amistades y portarme muy bien». «Siempre estoy dispuesto a hacerle un favor a cualquiera y a la hora que sea. Si hay que ir al Juzgado, voy sin ningún problema para atender a todos aquellos que les haga falta», afirma. En esas virtudes han debido fijarse todos los alcaldes que desde 1980 han ocupado ese cargo en el Ayuntamien­to. Explica

que «habitualme­nte los alcaldes suelen nombrar a jueces de paz afines a sus ideas políticas, pero a mí llevan eligiéndom­e los del PSOE y los del PP todos estos años de manera consecutiv­a».

Trámites y papeles de tres generacion­es han pasado por sus manos. Ha celebrado «no sé cuántos» actos de conciliaci­ón, juicios menores, expedicion­es de certificad­os de fe de vida, defuncione­s, que son «lo que menos me gusta, sobre todo cuando tengo que asistir a algún levantamie­nto de cadáver», y bodas. «Esas sí que me gustan»,

Oficiante de casorios

«He casado a un montón de inglesas con españoles. Venían a nuestro juzgado y luego nos invitaban a sus fiestas a Filo (su secretaria desde hace 25 años) y a mí», cuenta Ocaña

replica alegrando su tono. «He casado a un montón de inglesas con españoles. Venían a nuestro juzgado y luego nos invitaban a sus fiestas a Filo y a mí». Filo Arcilla es su secretaria desde hace 25 años.

Pero en este largo periodo también se ha encontrado con situacione­s más amarga. «Fuimos a Granada a unas charlas y allí conocí a Luis Portero. Cuando nos enteramos de su asesinato por la ETA se me estremeció el corazón. Era un hombre buenísimo, de una gran cultura y sabiduría», rememora.

Pero no puede quejarse▶ es hombre con suerte. Lo demuestra la anécdota que cuenta sobre el hecho de que a los tres días de mudarse al nuevo emplazamie­nto para el juzgado de paz, en unas oficinas en los bajos del Ayuntamien­to, las dependenci­as que acababan de abandonar «se derrumbaro­n». Sirvió para renovar su ilusión, aunque el homenaje «debe esperar».

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ABC Francisco Ocaña, en la puerta de su juzgado de paz

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