De la Torre desaira a la Junta y apoya el Nutriscore de Garzón
Cree que el rechazo de Bendodo al semáforo nutricial puede ser «un malentendido»
El alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, se sumó ayer al tira y afloja por el polémico semáforo nutricional que estos días ha tensado la cuerda entre el consejero de Presidencia, Elías Bendodo, y el ministro de Consumo, Alberto Garzón, por la posición que el etiquetado le concede a productos como el jamón y el aceite de oliva. Lejos de tomar posiciones de partido, el regidor defendió las bondades del Nutriscore y apuntó que la campaña en contra impulsada por Bendodo es fruto de un «malentendido».
De la Torre hizo estas declaraciones en una rueda de prensa tras reunirse con el ministro en Málaga para abordar un proyecto piloto contra la obesidad que se va a poner en marcha en los institutos. Según el alcalde, él mismo ha oído al ministro «hablar bien del aceite de oliva», de ahí que no comparta las acusaciones de Bendodo, que la pasada semana lanzaba una campaña con el lema ‘Yo, aceite y jamón’ dirigida explícitamente contra Garzón.
«Al final todas las administraciones tenemos que defender que nuestros productos tengan una buena imagen», señaló el regidor, que confió en que «viendo las cosas con serenidad» se pueda llegar a los acuerdos necesarios en pro de la salud y de las empresas. «Es bueno para los que producen y para los que consumen», dijo el regidor.
El primer edil suma así un nuevo
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Dupla contra Bendodo
El ministro acusó al consejero delante del alcalde de orquestar una campaña «difamatoria» en su contra
episodio a la lista de desencuentros con el consejero y presidente de su partido en la provincia, como ocurrió en su día con la pertinencia de encender el alumbrado navideño o las declaraciones -también «malentendidas»- sobre los terrenos para el tercer hospital de Málaga.
Tampoco el ministro Garzón huyó de la polémica durante la comparecencia, y a preguntas de los periodistas, volvió a acusar al consejero de Presidencia de haber iniciado una campaña «difamatoria» contra su persona basada en una «falsedad». Apeló a Bendodo para pedirle que se tome en serio el asunto y que si quiere promover la crítica y el debate sobre este asunto lo haga «por los cauces apropiados».
Etiquetado voluntario
«No comparto ni las palabras ni el estilo de Bendodo», subrayó Garzón, que aprovechó para defenderse asegurando que antes de que el consejero iniciara la campaña, él ya subrayó que el aceite de oliva es un elemento central de la dieta mediterránea, la cual hay que «fomentar». Al margen de la polémica, insistió en que este sistema de etiquetado es voluntario, «de modo que si alguna empresa considera que su producto no debería incorporar esta etiqueta no hace falta que lo haga».
Ante las insistentes críticas del consejero, que durante días ha colgado en su cuenta de Twitter fotos con el desayuno típico andaluz, el ministro también recordó que la implantación del semáforo nutricional en España se anunció en 2018, cuando él aún no estaba en el Gobierno. Pese a todo, reconoció creer firmemente en la utilidad de la herramienta, que está «avalada por organismos científicos» y será mejorada desde su Ministerio.
Según Alberto Garzón, aunque su aplicación aún no es mayoritaria, se trata de una herramienta consolidada ya a nivel internacional en países como Francia y Alemania. Además apuntó -, genera «incentivos positivos» en el ámbito empresarial, animando a las compañías a mejorar la calidad nutricional de sus productos y, por ende, su posición en el Nutriscore.
El encuentro entre el ministro y el alcalde se enmarca en la puesta en marcha de un proyecto piloto para promover los hábitos de alimentación sostenible y saludable entre los más jóvenes. Málaga será una de las cuatro ciudades españolas elegidas por el Ministerio para desarrollar la iniciativa, que arrancará previsiblemente antes de final de año. Según explicó Alberto Garzón, consistirá en un testeo en el primer ciclo de secundaria para conocer qué comen los jóvenes y poder desarrollar estrategias para corregir los malos hábitos.
Desde el Ministerio han visto oportuno que Málaga sea una de las ciudades elegidas después de comprobar «los esfuerzos que hace el Ayuntamiento» por promover los hábitos de vida saludables, algo que va en la misma dirección que los esfuerzos del Gobierno.