El juez del caso Neurona ve indicios de delito en la niñera de Montero
Acuerda investigar también por separado las donaciones del Instituto 25-M
El titular del Juzgado de Instrucción número 42 de Madrid, Juan José Escalonilla, ha abierto procedimientos independientes para investigar al margen del caso Neurona, la existencia de indicios de delito en el supuesto uso de una empleada de Podemos, Teresa Arévalo, como niñera de la ministra de Igualdad, Irene Montero.
En un auto al que tuvo acceso ABC, Escalonilla acuerda investigar por separado este y otros hechos denunciados por la exabogada de Podemos Mónica Carmona▶ el supuesto cobro por parte de Pablo Iglesias de 7.000 euros en costas judiciales que correspondían al partido y una donación y un convenio que suman medio millón de euros a través de su fundación, el Instituto 25-M que dirige Juan Carlos Monedero.
El juez rechaza así el recurso de Podemos contra la decisión de incorporar a la causa la documentación aportada por la exabogada, que no tiene relación con el contrato de consultoría electoral que es objeto del procedimiento. «Es cierto (...). Ahora bien, denunciados hechos nuevos que podrían ser constitutivos de delito, no cabe abstraerse de su denuncia», razona el juez.
Considera no obstante, que la fórmula adecuada no es abrir piezas separadas dentro del caso Neurona, como instaba la Fiscalía para evitar que esta causa se convirtiese en «una auditoría» de Podemos. En su opinión, es más oportuno incoar «procedimientos independientes, toda vez que de tramitarlos en pieza separada su investigación podría conllevar la dilación en la tramitación del presente procedimiento seguido, entre otros, por un delito electoral» que, por ley, debe investigarse con carácter de urgencia.
Esto significa en la práctica que los tres asuntos que salen del caso Neurona se convierten en procedimientos autónomos que no necesariamente instruirá el mismo juez. De acuerdo a fuentes jurídicas consultadas por ABC, lo natural es que una vez abra las diligencias para cada uno de los temas, las envíe a reparto y se asigne al suyo o a cualquier otro juzgado de instrucción.
Ramificaciones
En el caso de la supuesta niñera, Carmona denunciaba un uso ilegítimo o un abuso de los recursos del partido en beneficio de Irene Montero, que habría estado utilizando a una trabajadora «a sueldo de Podemos» como cuidadora de su hija. Aportó los recibos de un viaje electoral a Alicante en el que habrían participado aquella empleada, su ahora jefa de gabinete adjunta en el Ministerio de Igualdad, Teresa Arévalo, sin jugar en el evento ningún papel. Viajaba la niña con ellas. Pero la exabogada señalaba un caso más, el de una empleada que dijo haber sido utilizada como escolta y recadera por la ahora ministra hasta su despido.
En cuanto a las donaciones, que tendrán también sus propias diligencias, Carmona puso en el foco los 300.000 euros que entre el Instituto 25-M y el Grupo Parlamentario se aportaron al proyecto Escuela Popular Paulo Freire, una formación online en la que dan charlas miembros de Podemos como Rafael Mayoral. Por otro lado, señaló un convenio entre la fundación y el partido por importe de 200.000 euros para «fines poco definidos», según expuso ante el juez.
Por último, está la denuncia sobre las costas que según la letrada debieron revertir en el partido, que pagaba abogado y procurador, y no en el bolsillo de Pablo Iglesias.
Teresa Arévalo, jefa de Gabinete de Montero
Por separado
El juez abre diligencias aparte que podrá instruir otro juzgado para no dilatar el caso Neurona