La banca trabaja con Economía en un pacto para adelantar los fondos europeos
El sector presiona para aprobar un convenio que cree una figura de entidad colaboradora
El tiempo corre en contra del Gobierno para presentar su plan de recuperación definitivo. Tiene hasta el 30 de abril para enviárselo a Bruselas. Y la banca no quiere quedarse fuera de los 150.000 millones que llegarán a España en forma de fondos europeos. Por ello, las entidades financieras ya se han reunido con el Ejecutivo para plasmar en tinta cuál será su papel en todo el proceso de transformación económica tras la crisis del Covid.
Los bancos, a través de sus patronales, mantienen contactos con la vicepresidencia de Asuntos Económicos para intentar sacar adelante un convenio marco que concrete su participación en el plan de recuperación. Asimismo, también se han sucedido reuniones entre directivos de las mayores entidades españolas para abordar este asunto. Fuentes financieras apuntan a que Banco Santander y Caixabank, por su tamaño, maquinaria y trato con empresas, son los dos más interesados en que se dé un rol principal al sector en la canalización de los fondos europeos. Desde el departamento que dirige Nadia Calviño apuntan a que mantienen un contacto continuo y habitual con las entidades financieras, y añaden▶ «Entendemos que el papel de la banca puede ser importante para facilitar la financiación complementaria para el desarrollo de los proyectos de inversión».
Uno de los puntos en los que la banca está haciendo más fuerza es sobre su disposición a adelantar el dinero para los proyectos que se aprueben, para que el país no deba depender de esperar plazos para la llegada efectiva de los fondos europeos. Las entidades, así, ponen a disposición del Gobierno y del tejido productivo su liquidez –que es grande, gracias a las subastas Tltro III del Banco Central Europeo (BCE)– para que las ideas empresariales salgan adelante cuanto antes. Sin embargo, anticipar el dinero exigiría también, como explican fuentes financieras, que el Ejecutivo se comprometiera mediante algún mecanismo público –apuntan al Instituto de Crédito Oficial (ICO)– a que esos fondos le serían devueltos más adelante a los bancos. Una suerte de garantía de que las cantidades tendrán su vuelta a los balances bancarios.
Pero el convenio que quiere firmar el sector con el Gobierno va más allá. La banca trata de ‘vender’ que inmiscuir al sector privado en la gestión y canalización de los fondos sería una opción bien vista por Bruselas. En este sentido, las entidades se ofrecen también a multiplicar el efecto de los proyectos mediante la cofinanciación y coinversión. Esto es, por ejemplo, que si un proyecto necesitara dos millones de euros y ‘solo’ recibe un millón de euros en fondos europeos, la banca estaría dispuesta a hacerse cargo de conceder el crédito restante.
El valor de la experiencia
A todo ello, además, se une que las firmas financieras ponen en valor frente al Ejecutivo de Pedro Sánchez que ellas disponen de mucha experiencia previa en el cribado de proyectos empresariales viables. El sector transmite que en su labor básica está la de estudiar los proyectos de clientes que les llegan para saber si pueden o no darles crédito. Esa experiencia, según se ha transmitido al Gobierno, la pondrían también sobre la mesa, así como su maquinaria del día a día. Una maquinaria que, como afirman fuentes financieras, les permite llegar a todas las partes de España con suma facilidad. Las sucursales, a juicio del sector, son el mejor lugar para canalizar los fondos hacia las empresas.
Las fuentes consultadas señalan que la participación de la banca en el plan de recuperación no solo obedece a una intención altruista, sino que tiene un trasfondo económico, y reputacional. Desde el punto de vista reputacional, el sector sigue pensando en que necesita recobrar la buena imagen que perdió en la anterior crisis. Por ello también llevan ya un año tendiendo la mano al Gobierno en todas las ayudas públicas, aunque también es cierto que la paciencia de las entidades se ha agotado por momentos ante el maltrato que creen que a veces les ha dado el Ejecutivo.
Desde el punto de vista económico, hay quien en el sector ve los fondos europeos una manera de evitar exponerse más a la morosidad. Y, asimismo, los perciben como una ocasión para seguir captando clientes fieles y vinculados.