La subida de los carburantes también desbarata los Presupuestos de 2021
Los precios enfilan un alza que duplica lo previsto en las cuentas, y el crudo ya cotiza un 48,5% por encima
Los Presupuestos del Estado para 2021 reposan en un cuadro macroeconómico que está envejeciendo a una velocidad de infarto en plena pandemia y ante la incertidumbre de un escenario que cambia cada semana. Junto a la optimista estimación de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del 9,8% que contenían las cuentas –rebajada al 7,2% si se descuenta el impacto de los fondos europeos–, el retorno de la inflación de la mano del encarecimiento de los carburantes complica aún más el panorama económico. La Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas) revisó el pasado viernes al alza su estimación de inflación del 1,5% al 1,8%, una cifra que supone el doble del 0,9% que descontaba el Ejecutivo en las cuentas.
Precisamente, un 0,9% fue el incremento que aprobó el Ejecutivo para los empleados públicos y los pensionistas, ateniendo a sus previsiones de evolución de los precios. La razón por la que aumentarán no será el despertar del consumo o una evolución más positiva de la economía frente a lo esperado sino, sobre todo, el encarecimiento de los carburantes. El barril de Brent se ha disparado un 85% desde noviembre de 2020 y ya vuela rozando los 70 dólares. Los Presupuestos mantienen unas previsiones del precio medio del barril de 46,6 dólares que ya se ha superado ampliamente, al cotizar un 48,5% por encima. Una situación que parece lejos de cambiar, ya que la OPEP+ anunció la semana pasada que mantendría los recortes de producción aprobados en abril del año pasado, al comprobar que la demanda seguía en un estado de debilidad. Durante 2020 se produjo el fenómeno contrario▶ los precios se desplomaron ante el shock de demanda que supuso la crisis del coronavirus.
«En un escenario alternativo en el que el precio del crudo se encarece hasta 85 dólares, la tasa media anual sería del 2,1% en 2021 (del 3% en diciembre), y del 1,6% en 2022 (1,3% en diciembre). En el escenario opuesto, en el que la cotización del petróleo desciende hasta 45 dólares, la tasa media anual se situaría en el 1,4% en 2021 (con una interanual en diciembre del 1,4%), y en el 0,2% en 2022 (0,4% en diciembre)», sostiene Funcas.
Este último movimiento es una mala noticia para España, que importa el 99% del crudo que consume. Precisamente, el desplome de los precios del petróleo había permitido que nuestro país redujera un 58% su déficit comercial en 2020 pese a la caída de las exportaciones. La balanza por cuenta corriente incluso acabó en positivo, con un superávit de 8.000 millones, pese al hundimiento del turismo, que supuso una reducción del 70% del excedente de financiación con el exterior. Ahora este escenario se complica.
Ello se une a una evolución económica que se aleja de lo pronosticado en las cuentas ante el golpe de la tercera ola. La Autoridad Fiscal, en su previsión de crecimiento del PIB en tiempo real, ya arroja un -1,4%. Todos los datos coyunturales de 2021 que estudia el Ministerio de Economía en su resumen semanal están ya en negativo, con el consumo de energía reduciéndose un 4,6% en febrero, la confianza industrial bajando un 9,6%, las matriculaciones desplomándose un 38,4% y las ventas en grandes empresas hundiéndose un 7,8%. El índice de producción de servicios PMI siguió en territorio de contracción –menor a 50 puntos–, al marcar 45,7, una leve mejoría frente a los 45,4 de enero. IHS Markit señaló a España como única economía del euro que siguió destruyendo empleo en febrero▶ la afiliación a la Seguridad Social en dicho mes se redujo en unas 71.000 personas en términos desestacionalizados descontando los ERTE.Fuentes del Ejecutivo señalan que el Ministerio de Economía ya contempla una revisión a la baja del crecimiento porque no cree que se alcance ni el 7,2% que pronosticó en su momento sin el impacto de los fondos europeos. El Gobierno basaba las cuentas en una estimación del 9,8% para 2021, un entorno de crecimiento al
Déficit comercial
El desplome del precio del crudo durante el año pasado permitió que el déficit comercial de nuestro país bajara un 58%
La inflación y las previsiones fiscales
La recaudación tributaria prevista por Hacienda aumentará con mayor fuerza ante el despertar de los precios