«Que exista el derecho al divorcio no implica divorciarse si te amas»
A Ángel Hernández todos ustedes le pondrán cara; él la dio en un vídeo antes de que su «compañera María José», como la llama, dejase este mundo con su asistencia y por voluntad propia. A punto de cumplir 72 años, este técnico audiovisual retirado dice que entonces le llovió la solidaridad y le definían con su nombre▶ «ángel». Todo lo contrario que a Asun Gómez, la viuda de Luis de Marcos –cuya muerte natural presenció–, a la que llamaban «asesina».
Historias diferentes con muchos elementos parejos▶ María José Carrasco y Luis, también técnico de televisión, padecían esclerosis múltiple primaria progresiva, aunque esta ‘enfermedad de las mil caras’ se manifiesta en cada persona de una forma desigual, con un ritmo de avance frenético y dispar. María José llevaba desde 1989 postrada; a Luis le afectó a su aparato locomotor, pero su «capacidad cognitiva» era increíble, afirma a ABC su mujer. «Era inteligente, guapo, divertido, un buen conversador. Lo que Luis pedía para él no lo quiero yo para mi madre –reconoce Asun, de 54 años–. Pero él insistía▶ ‘no quiero vivir más’. Hoy es un día de victoria, de decirle a él▶ misión cumplida». Asun ha continuado estos cuatro años la causa para despenalizar la eutanasia que Luis, con 50 años, enfiló. El presidente de Derecho a Morir Dignamente (DMD), Javier Velasco, repite que «nadie quiere morir, pero a veces la vida es más dura que la muerte».
«Vivir es un derecho, no una obligación» es la frase con que ellos, así como
Sin ideología «Esto no va de ideologías. Lo que Luis pedía para él no lo quiero yo para mi madre»
Txema, Danel y David Lorente, viudo e hijos de la vasca Maribel Tellaetxe, enferma de alzhéimer fallecida el 6 de marzo de 2019, suscribieron al abrir varias peticiones de firmas en la plataforma Change.org. Eso les condujo, primero, a entregar un millón de firmas al Congreso. «Son causas mediáticas y muy populares. Ángel llegó a recopilar medio millón», dicen a este diario representantes de la plataforma. Y en segundo lugar, a ver cumplido su deseo al observar a los diputados votar ayer a favor. «La ley es mejorable, pero contiene lo básico», opina Asun. Ángel, desde su domicilio madrileño,