Biden exige endurecer el acceso a las armas tras dos matanzas
apruebe cualquier limitación.
Se vio en las reacciones de legisladores republicanos, que criticaron que se busque utilizar la tragedia para impulsar la agenda política de los demócratas y menoscabar el derecho de los estadounidenses a portar armas. «Cada vez que hay un tiroteo, hacemos este teatro ridículo», criticó el senador republicano Ted Cruz en una sesión convocada en el Senado sobre violencia con armas. Él y otros republicanos quieren circunscribir los límites a evitar que convictos y personas con enfermedades mentales puedan comprar armas.
No se sabe de momento si el presunto autor de la matanza de Boulder encajaría en alguno de esos supuestos. La Policía de la localidad lo identificó ayer como Ahmad Al Aliwi Alissa, de 21 años, vecino de Arvada, un suburbio de Denver, a media hora en coche de Boulder.
La Policía no había ofrecido ningún detalle, al cierre de esta edición, sobre las posibles motivaciones de Alissa para plantarse en un supermercado y disparar a clientes y trabajadores. Algunas de las víctimas fueron tiroteadas en el aparcamiento y otras dentro del establecimiento. Tampoco se dio información sobre qué arma usó, ni cómo había accedido a ella.
Un escrito de la Policía, sin embargo, asegura que Alissa compró un rifle semiautomático Ruger AR-556 pocos días antes de la tragedia, que vestía ropa de camuflaje al llegar al supermercado y que portaba también una pistola semiautomática. Su cuñada aseguró que le había visto probar un arma que parecía «una metralleta» dos días antes de la masacre.