Objetivo, Ayuso

Fue convocar la dirigente del PP las elecciones y la legión socialista se ha puesto a disparar contra la gestión del Covid en Madrid

Una semana ha tardado el PSOE, de arriba abajo, en redoblar sus críticas más o menos agrias a la gestión de la pandemia en Madrid una vez que se supo que había elecciones autonómicas el 4 de mayo. Desde el Ministerio de Sanidad, la vicepresidencia primera del Gobierno u otras autonomías socialistas –ayer mismo coincidieron por ejemplo en el pelotón Darias, Calvo y Puig– tratan de hacer diana en Ayuso y cualquier decisión que tome al respecto es tenida por un ataque a la salud pública de la presidenta madrileña. Recordemos que Sanidad ha ido aceptando muchas decisiones sugeridas por Madrid en distintas fases de la pandemia (cerrar los colegios, mascarillas para todos, controles en Barajas, test de antígenos en las farmacias...) que en principio fueron denostadas o despachadas como salidas de pata de banco. No ocurre solo con Madrid. El Gobierno iba a llevar a Castilla y León a los tribunales si se le ocurría adelantar el toque de queda a las ocho de la tarde, para un mes después (y con una incidencia acumulada muy inferior que cuando Mañueco lo planteó) proponer ese «a las ocho, todo el mundo en casa», tumbado finalmente por la oposición al menos de la mitad de las regiones. Aunque para el Gobierno solo es Ayuso, la gran obsesión de la izquierda, quien pone pegas.