Calvo Poyato: «Los españoles tendemos a recrearnos en los momentos negros»
El historiador y novelista presenta ‘La travesía final’ de la vida de Elcano
A duras penas la memoria del mundo, incluida la de su país, ha prestado atención al papel de Juan Sebastián Elcano en la primera vuelta al mundo. Solapado por Magallanes, que pereció incluso antes de llegar a las islas de las Especias, ninguneado por el cronista Antonio Pigafetta y desdibujado en los textos de Stefan Zweig, al navegante español el foco le ha sido esquivo incluso en su momento estelar. Por no hablar de lo que ocurrió después, a su regreso a España, en la cara más amarga de su biografía, que ni siquiera ocupa un par de líneas discretas en los manuales de Historia.
El escritor e historiador José Calvo Poyato (Cabra, 1951) publica la novela ‘La travesía final’ (Editorial Harper) para enmendar este descuido con un personaje fundamental en la historia de la humanidad. «No somos dados a reconocer a los grandes acontecimientos de nuestro pasado y siempre tendemos a mirar los momentos más negros, donde hasta nos recreamos, lo cual explica como a Elcano se le pierde la pista a su regreso a España», señala el autor.
La novela arranca un mes después del final de la primera vuelta al mundo y sitúa a Elcano en un sinfín de aventuras que le llevarán de nuevo a los confines de la tierra, pero también por Sevilla, Madrid, Badajoz, La Coruña y otros sitios españoles donde se estaba decidiendo el futuro del mundo en el siglo XVI. «Es un período asombroso porque, mientras se suceden expediciones y tensiones con Portugal, se estaban negociando dos matrimonios entre los Habsburgo y los Avis. En la novela cuento algo de esas negociaciones y de la guerra contra Francia, donde tuvo lugar por esas fechas la victoria en Pavía y la captura del Rey Francisco I», recuerda Calvo Poyato, que presenta en ‘La travesía final’ al Rey de Francia preso en Madrid, mientras Elcano organiza en La Coruña su siguiente viaje a el Pacífico.
A su regreso a la Península, Elcano fue recompensado por su gesta con una pensión anual de 500 ducados y el derecho a usar en su escudo el lema latino ‘Primus circumdedisti me’ (Fuiste el primero que la vuelta me diste), exactamente el mismo que sesenta años después recibió el británico Francis Drake de manos de la Reina de Inglaterra por dar la vuelta al mundo. «Ya se sabe que los ingleses tratan siempre de apropiarse no solo de las vacunas, sino de determinados acontecimientos históricos. A diferencia de lo que nos ocurre a nosotros, los británicos se han dedicado a glorificar su pasado. Si para ello, como en el caso de Drake, tienen que mentir, pues no lo dudan», considera Calvo Poyato.
El columnista de ABC califica como «detestable» el uso que hacen algunos políticos del relato histórico en beneficio de sus intereses ideológicos y sus necesidades partidistas. Frente a la posibilidad de que Elcano, como Cosme Churruca en Palma de Mallorca o el Almirante Cervera en Barcelona, acabe tachado de franquista, Calvo Poyato prefiere tomárselo con humor▶ «Es difícil que Elcano sea acusado de franquista porque, claro, entre este personaje histórico y Franco hay casi 500 años de diferencia. Sería un caso verdaderamente prodigioso, aunque cosas más raras se han visto. No faltará quien lo tilde de imperialista o de algo parecido...», asegura entre risas el novelista, que advierte del peligro del presentismo y de realizar juicios morales a personajes de otras épocas bajo criterios actuales.