«La Cámara de Cuentas debe estar siempre alejada del debate político»
Asume el mando de la institución encargada de fiscalizar los fondos públicos de la comunidad con el doble empeño de agilizar sus informes y aislarla de cualquier «injerencia» política
Carmen Núñez García, doctora en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad de Sevilla, abre una nueva etapa al frente de la Cámara de Cuentas de Andalucía tras un traspaso de poderes poco amistoso. El presidente saliente, el consejero del PSOE Antonio López, se resistió hasta el final a dejar el cargo que ha ocupado durante una década. Hicieron falta dos informes jurídicos que daban por agotado su mandato para desbloquear su relevo. La nueva responsable, sin militancia política y con una dilatada carrera académica y profesional, confía en que las «aguas vuelvan a su cauce» más pronto que tarde. Está convencida de que la institución debe estar a resguardo de la lucha partidista y «hablar sólo a través de los informes de sus técnicos». En este empeño va a volcar todas sus energías.
—Ha desarrollado toda su carrera académica y profesional en la empresa privada y en la Universidad. ¿Por qué se decidió a entrar en la Cámara de Cuentas de Andalucía?
—Surgió la oportunidad y no lo dudé. Para una profesora del Departamento de Contabilidad y Economía Financiera de la Universidad de Sevilla, trabajar en la Cámara de Cuentas es el culmen de su carrera profesional. Además, es un reto que asumí, entre otras razones, por la gran vocación de servicio público que siempre me ha guiado.
—A la Cámara de Cuentas siempre se le ha achacado que analiza programas y gestiones que se remontan a varios años atrás, sobre situaciones pasadas y a veces ya corregidas. ¿Se plantea agilizar estos informes para que resulten más útiles?
—Sí, es evidente que tenemos que hacer un esfuerzo por mejorar nuestra organización interna y los procesos de fiscalización. A veces los trabajos se extienden demasiado y, en cierta manera, pierden parte de su valor. Pero la labor de fiscalización es compleja y necesariamente muy técnica y garantista, lo cual requiere su tiempo. Esto no quita que debamos cumplir con nuestra obligación finalizando los informes en un periodo de tiempo más adecuado. La apuesta que estamos haciendo con las sucesivas ofertas públicas de empleo y con la aplicación de las nuevas tecnologías de la información a los trabajos de auditoría ayudará muchísimo a agilizarlos.
—En cuanto a su llegada, ¿se imaginaba que iba a encontrarse con semejante ‘juego de tronos’ en una institución encargada de fiscalizar la gestión económica, financiera y contable de la Junta y de otras administraciones públicas en la comunidad? —No acabo de llegar. Soy consejera desde hace año y medio. En este periodo de tiempo creo conocer ya sus fortalezas y debilidades. A nadie se le escapa que hemos atravesado momentos de dificultad, pero hay que mirar al futuro. La Cámara de Cuentas debe guiarse con absoluta dedicación, con lealtad institucional, desde el máximo respeto a los profesionales y su criterio técnico. Espero que todos estemos a la altura de la responsabilidad que la sociedad andaluza, a través de su Parlamento, nos ha encomendado.
—¿Cree que la imagen proyectada en las últimas semanas, con un presidente de la Cámara en funciones, Antonio López, enrocado en no dejar su
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Lejos de la lucha partidista
La institución debe hablar sólo a través de los informes que hacen sus técnicos, sin ningún tipo de injerencia
Transparencia
Estoy a favor de sancionar a las entidades locales que incumplan su obligación legal de rendir cuentas
—Usted tiene un perfil tecnócrata. No ha ocupado cargos políticos y ni siquiera milita en Ciudadanos, el partido que la propuso como consejera. ¿Eso puede jugar a su favor para normalizar la actividad de la institución? —Creo que sí. Mi deseo es que siempre el consenso, el diálogo y los criterios técnicos sean la base de nuestro trabajo en la Cámara. Sin duda esto beneficiará a todos los que formamos parte de ella y nos ayudará a centrar todos nuestros esfuerzos en la importante tarea que nos ha sido encomendada▶ la fiscalización de los fondos públicos, velar por el cumplimiento de la legalidad y la mejora de la gestión de las políticas públicas en Andalucía. —Continúa como consejero el presidente saliente, que no ha encajado bien su relevo e incluso ha presenta