Exigen cargos más graves contra la policía en el funeral de Daunte Wright
El veredicto de culpabilidad de Derek Chauvin, el policía que mató a George Floyd, no ha acabado con las exigencias de rendición de cuentas a las fuerzas de seguridad en Mineápolis y otras partes de EE.UU.. Mientras languidecían las celebraciones del veredicto, una iglesia al Este de la principal ciudad de Minesota celebraba ayer el funeral por la muerte de Daunte Wright, el caso más reciente de abusos policiales. Wright, un joven negro de 20 años, murió en un control de policía cuando una agente le disparó tras confundir, aparentemente, su Taser –un arma paralizante no letal– con su pistola.
Ocurrió hace menos de dos semanas a menos de 15 kilómetros donde hace un año murió Floyd. Ayer, la familia de Wright, de otras víctimas similares, líderes de organizaciones de derechos civiles y autoridades se reunieron en la iglesia Shiloh.
En el servicio, el abogado de la familia, Ben Crump, exigió que se impusieran cargos más graves contra la agente involucrada, Kim Potter. La semana pasada, después de abandonar el cuerpo de policía, fue acusada de homicidio imprudente.
La elegía corrió a cargo del reverendo Al Sharpton, líder de la Nation Action Network. En su intervención, defendió uno de los lemas que se corean en las calles▶ ‘Sin justicia no habrá paz’. «La gente confunde paz con estar callados», dijo a la congregación y a los familiares de Wright. «No nos podéis decir que nos callemos y suframos, debemos pronunciarnos cuando hay una injusticia», aseguró. «Ha llegado el momento de que la policía entienda que no puede estar por encima de la ley».
La madre de la víctima apenas pudo hablar. «Un hijo debe enterrar a su madre, no al revés», dijo.