Sanciones para los militares críticos con el Gobierno francés
Varios centenares de miembros del Ejército habían denunciado la desintegración del país
El general François Lecointre, jefe de Estado Mayor de los Ejércitos, la más alta autoridad militar de la nación, anuncia sanciones disciplinarias mayores para los militares que firmaron un manifiesto denunciando la «desintegración» de Francia. En unas declaraciones al diario ‘Le Parisien’, Lecointre hace este análisis de la polémica▶ «De entrada, pensé que se trataba de una polémica sin gran interés, entre los firmantes de esa tribuna, en un medio minoritario, solo hay 18 en activo, entre los 210.000 militares en activo. A la luz de la polémica, en estrecha colaboración con el jefe del Estado, hemos decidido tomar sanciones disciplinarias».
Tras la publicación de un manifiesto, encabezado por una mayoría de oficiales jubilados, otros varios centenares de soldados y oficiales han podido firmar el texto original, apoyando, con su firma, una suerte de panfleto redactado por el general Piquemal, jubilado hace muchos.
Comportamiento indigno
El jefe de Estado Mayor de los Ejércitos comenta de este modo la polémica y las decisiones que se van a tomar▶ «Esas firmas no reflejan en absoluto la realidad de los ejércitos. Nuestros soldados y oficiales son republicanos, de origen muy diverso, todo lo contrario de los fantasmas alimentados por una minoría que ha sido sancionada en muchas ocasiones. Es el caso del general Piquemal, le voy a escribir personalmente que el suyo es un comportamiento indigno, que ensucia a nuestros ejércitos, fragilizándolos, convirtiéndolos en motivo de polémica. A partir de ahí, la autoridad militar tomará las medidas pertinentes». Las medidas pertinentes tendrán distintos matices. Los soldados y oficiales identificados serán condenados con sanciones disciplinarias. Las sanciones serán más severas para los militares de mayor rango. La veintena de generales próximos a la jubilación serán excluidos, forzados a una jubilación forzosa. En la mayoría de los casos se forzarán las jubilaciones automáticas.
En un tono grandilocuente, la tribuna que provocó la polémica decía que los firmantes están dispuestos a «apoyar políticas que tomen en consideración la salvaguarda de la nación». El general Lecointre, hace este balance de la polémica▶ «Se trata de un asunto orquestado por personajes que abandonaron el Ejército hace veinte o treinta años. Se trata de un comportamiento indigno e irresponsable. Mucho ruido para nada. Quienes intentan montar una campaña artificial rinden un flaco servicio al Estado y sus ejércitos, integrados por soldados que rechazan masivamente la manipulación inaceptable».