Plantillas «raquíticas» y exigencia de órdenes claras

Los sindicatos policiales y las asociaciones de Guardia Civil pusieron voz ayer a las quejas de sus afiliados que se están dejando la piel en la crisis migratoria más grave en décadas. El SUP denunció el gravísimo error del ministro Marlaska en Ceuta, donde hay «una plantilla raquítica de 500 policías» frente a una avalancha de más de 6.000 inmigrantes en plena pandemia. Dicen que ellos ya avisaron de la necesidad de ese refuerzo policial y piden responsabilidades a Interior y una reunión urgente con la Dirección General de la Policía.

Jupol y Jucil, organizaciones que representan a policías y a guardias civiles, respectivamente, exigieron refuerzo de personal y «órdenes claras y contundentes» para actuar en Ceuta, criticando el anuncio de 200 agentes más porque es «claramente insuficiente» y más «viendo ya conatos de violencia contra los funcionarios». A juicio de ambas se está poniendo en peligro a los ceutíes.

AUGC, de Guardia Civil, se refirió a una respuesta extraordinaria, con el envío de refuerzos y la presencia del Ejército, «cuya labor apoyamos y agradecemos enormemente», pero denunció que estos recursos de emergencia «no deben hacernos olvidar la precariedad permanente bajo la que trabajan de manera habitual los guardias civiles que vigilan las fronteras». No solo faltan medios y personal, dicen, sino también protocolos de actuación claros. Y eso, según ellos hace que los agentes deban actuar como «meros escudos humanos» ante las avalanchas.