Washington y París se enfrentan en la ONU por Oriente Próximo
Macron se alinea con Egipto tras firmar la venta de 30 aviones de combate a El Cairo
Instalada en el podio de tercer exportador mundial de armamentos, con relaciones militares y estratégicas privilegiadas con Egipto y Qatar, Francia, miembro permanente del Consejo de Seguridad, no duda en defender, en Naciones Unidas, un proyecto de resolución sobre la crisis entre Israel y Hamás muy alejado de las posiciones de los EE.UU. y la UE.
Fiel a sus compromisos de Estado, financieros, industriales y militares con Egipto, la Francia de Emmanuel Macron ha decidido «hacer la guerra», pacífica, por su cuenta, al margen de la «diplomacia común» de la Unión
Europea, y muy alejada, así mismo, de la administración Biden en Washington. El presidente francés se reunió el miércoles, en vídeo conferencia, con el presidente de la República Árabe de Egipto, Abdelfatah El-Sisi, y el Rey del Reino Hachemita de Jordania, Abdalá II, para concertar posiciones y redactar un proyecto de propuesta de resolución, a someter al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Las diecisiete líneas de la proposición insisten en estos puntos▶ «Consternación ante la escalada y tensiones». «Llamamiento al cese el fuego inmediato». «Urgencia de analizar las raíces profundas del conflicto, llamamiento a negociaciones efectivas». A juicio de Macron, El-Sisi y el Rey de Jordania las negociaciones y resolución del conflicto deben partir de las bases de la proposición de dos Estados.
El proyecto de propuesta de resolución termina haciendo un llamamiento a la apertura de posibles corredores humanitarios destinados a hacer llegar ayuda humanitaria a Gaza.
El proyecto de resolución francoegipciojordano es la acción diplomática más llamativa, hasta ahora, tras los últimos acuerdos comerciales y militares entre París y El Cairo, del mes de abril pasado, tras una larga década de consolidación de las posiciones estratégicas de la industria militar de Francia en Oriente Próximo, donde sus primeros clientes son Egipto, Arabia Saudita y Qatar.
Dos semanas antes de la firma del proyecto de resolución presentada en Naciones Unidas, Egipto firmó la compra de una treintena de aviones de combate de la familia ‘Rafale’, por un montante de 3.950 millones de euros.