El coliseo presenta su temporada 2021-22, que incluirá el estreno de la nueva ópera de Luis de Pablo y ‘Hadrian’, de Rufus Wainwright
Todavía con el subidón del premio a mejor teatro de ópera de 2019, obtenido en los International Opera Awards, el Teatro Real desveló ayer la programación de la temporada 2021-22, «una de las mejores desde el punto de vista artístico», según presumió Gregorio Marañón, presidente de la fundación del coliseo, ayer en la presentación del curso. «No hemos perdido ambiciones –siguió–, y la excelencia es nuestra vocación». Dieciséis títulos operísticos, tres espectáculos de danza, quince conciertos, ocho producciones infantiles y cinco proyecciones cinematográficas conforman el arsenal que el Teatro Real presentará el próximo curso. Joan Matabosch, director artístico del coliseo, se mostraba especialmente satisfecho de la «cantidad sustancial de novedades»▶ diez de las óperas presentadas subirán por vez primera al escenario del Teatro Real.
Y es que la variedad, sigue Matabosch, es una de las características de la temporada, que presenta óperas de todos los siglos, desde el XVII al XXI, con varios estrenos absolutos, entre ellos el de la nueva ópera de Luis de Pablo▶ ‘El abrecartas’, con libreto de Vicente Molina Foix basado en su propia novela homónima; Fabián Panisello será el director musical y Xavier Albertí el director escénico.
El telón se levantará el próximo 20 de septiembre; ese día se ofrecerá el preestreno para jóvenes de la ópera ‘La cenerentola’, de Rossini, que volverá a sonar en la inauguración oficial de la temporada el día 23. Se presentará en una coproducción de la Den Nerske Opera de Oslo y la Opéra National de Lyon, con puesta en escena de Stefan Herheim y dirección musical de Ricardo Frizza.
Acontecimientos
Con su verbosidad y su didáctica erudición habituales, Matabosch desgranó la programación. Destacó especialmente como «acontecimientos» los estrenos de ‘Parténope’, de Georg Friedrich Händel; ‘El ángel de fuego’, de Sergéi Prokofiev; y ‘Juana de Arco en la hoguera’, de Arthur Honegger.
La primera, dijo, no se ha estrenado en España, y se presenta en una producción que presentó la English National Opera en 2008 y que lleva la firma de Christopher Alden. Ivor Bolton, director musical del Teatro Real, estará en el foso. La ópera de Prokofiev, por su parte, es un título que las autoridades soviéticas estrenaron casi de tapadillo porque estaba, según Matabosch, «en la frontera de lo inaceptable en la URSS. Supondrá el debut en el Real de uno de los grandes directores de orquesta españoles de hoy, Gustavo Gimeno, y la producción la firma Calixto Bieito. ‘Juana de Arco en la hoguera’ es en realidad un «oratorio dramático en once escenas», y se concibió como una «antiópera», según palabras de Matabosch, que añadió que «es una obra inclasificable, en la que Prokofiev incluyó formas de teatro que no fueran operísticas». La dirección musical es de Juanjo Mena –otro debutante español de renombre– y la dirección escénica de Àlex Ollé, de La Fura dels Baus. La protagonista será una actriz, Irene Escolar. Como prólogo, Ollé ha elegido ‘La doncella bienaventurada’, de Claude Debussy.
El resto de la temporada operística incluye ‘Las horas vacías’, de Ricardo Llorca, en el que supone el estreno absoluto de la versión escénica de esta obra, y que se ofrecerá en los Teatros del Canal dirigida por Alexis Soriano y José Luis Arellano; ‘La bohéme’, que vuelve en la producción de Richard Jones que ya se presentó en el Real hace tres temporadas, esta vez con dirección musical de Nicola Luisotti; ‘El ocaso de los dioses’, de Wagner, que cierra la Tetralogía que ha abordado el coliseo en las últimas cuatro temporadas, bajo la dirección musical de Pablo Heras-Casado y escénica de Robert Carsen; ‘Lakmé’, de Leo Delibes, que se ofrecerá en versión de concierto dirigida por Leo Hussain; ‘Rey Arturo’, de Henry Purcell, también en versión de concierto, bajo la batuta de Lionel Meunier; ‘Extinción’, un espectáculo de Agrupación Señor Serrano que incluye ‘Misa de Batalla’ y ‘Misa pro defunctis’, de Joan Cererols, con dirección musical
Nabucco
La célebre ópera de Verdi volverá al Real después de
151 años de ausencia en este
teatro
de Javier Ulises Illán –se presentará en el Teatro de La Abadía, que coproduce–; ‘Siberia’, un título apenas conocido de Umberto Giordano, que dirigirá en versión de concierto Domingo Hindoyan; ‘El nacimiento del Rey Sol’, de varios compositores, igualmente en versión de concierto de Sébastien Daucé; ‘Nabucco’, de Giuseppe Verdi –una ópera que no se representa en el Teatro Real desde hace 151 años–, con dirección de escena de Andreas Homoki y dirección musical de Nicola Luisotti; y ‘Hadrian’, de Rufus Wainwright, que se presenta en versión de concierto semiescenificada con la dirección musical de Scott Dunn y la dirección escénica de Jorn Weisbrodt.
Voces
Uno de los capítulos fundamentales en una temporada operística es el de las voces. El ciclo que lleva precisamente este título, ‘Voces del Real’, presentará seis conciertos en los que se podrá ver y escuchar a Juan Diego Flórez, Ana Netrebko y Yusif Eyvazof, Lise Davidsen, Lisette Oropesa, Jakub Józef Orlinski y Bejun Metha. Y el exiguo capítulo de danza incluirá tres espectáculos▶ el Ballet del Bolshoi de Moscú presentará uno de los grandes clásicos del repertorio▶ ‘La bayadera’, mientras que el Ballet Nacional de España traerá al Teatro Real su homenaje a Antonio Ruiz Soler en el centenario de su nacimiento; y el cubano Carlos Acosta –protagonista de la película ‘Yuli’, de Icíar Bollaín, visitará Madrid con su compañía, Acosta Danza.
Si Hemingway llamó ‘verano sangriento’ al de la competencia de Luis Miguel y Ordóñez, ésta está siendo una feria sangrienta, con los terribles percances de Manuel Perera, Juan José Domínguez y Pablo Aguado; también, una feria de grandes faenas▶ Ginés Marín, Morante, El Juli, Tomás Rufo, Daniel Luque y Roca Rey. Las dos caras de la Fiesta.
Después de tantos dramas, vivimos una tarde sin percances▶ ¡menos mal! Los toros de García Jiménez se han movido mucho, han sacado nobleza y, algunos, fuerzas justas. Una oreja ha cortado Perera; una, que hubieran sido dos, si mata bien, Ureña. A Luque le ha tocado el peor lote.
Miguel Ángel Perera mantiene su estilo poderoso, dominador. Como exprime