Garuba da un paso para dejar el Madrid
▸ Se apunta al draft de la NBA y, si sale en una posición alta, se irá a la liga americana
Cultivar talento se ha convertido en una misión de riesgo en Europa. Los jóvenes que más destacan ya no hacen carrera en sus equipos, sino que despuntan y miran muy rápido al otro lado del Atlántico, donde ya no hay recelos para ficharlos. Las dudas que fueron desapareciendo con el aterrizaje de Gasol, Nowitzki o Ginóbili se han disipado totalmente con el fenómeno Doncic, impulsando la llegada de nuevos jugadores imberbes que no sobrepasan la veintena y que dan el salto sin más que unos meses de experiencia en la alta competición.
Es el caso de Usman Garuba, que a sus 19 años ha decidido declararse elegible en el draft que se celebrará el próximo 29 de julio. Ese día, el pívot español –que podría encontrarse en Tokio disputando los Juegos con España– conocerá su futuro para la próxima temporada. Si resulta elegido en una posición alta no tendrá más remedio que dejar atrás su vida en la capital para comenzar una nueva andadura en la NBA.
Las previsiones más optimistas le sitúan ya a un paso del top-10 y una gran actuación en los próximos playoffs de la Liga Endesa –comienzan el lunes 31– le catapultaría incluso más arriba. Sea cual sea su posición final, no está obligado a dejar el Real Madrid, pero cualquier equipo de la NBA que decidiera ir a por él solo lo haría si antes hubiera obtenido el compromiso del pívot para jugar desde la próxima temporada con su camiseta. Garuba se lo ha pensado mucho antes de dar este paso. Sabe que aún tiene que mejorar en diferentes aspectos y que el Real Madrid es un sitio ideal para ello, pero también tiene claro que la NBA puede ser un aprendizaje brutal en su carrera.
Decisión difícil Se lo ha pensado mucho, pero está decidido a triunfar entre los mejores y confía en su talento
Dos millones de cláusula
Cada vez es más habitual que las franquicias de la NBA se lancen al mercado europeo en busca de piezas para reforzar sus equipos. Interés que es mayor desde que Doncic demostró que más allá del origen o de la juventud, lo que importa es el talento y el descaro. Su explosión en la liga ha desembocado en una tendencia creciente para buscar refuerzos fuera de Estados Unidos.
Así, esta temporada el Madrid vio cómo Campazzo y Deck dejaban el equipo a mitad de campaña para jugar en la NBA. Camino que ha seguido también Vildoza hace solo unos días. Tendencia que confirma el peligro creciente de las franquicias de la liga americana, cuyo potencial económico es insuperable.
Garuba tiene una cláusula de salida a la NBA de dos millones de euros, que podría abaratarse si alcanza un acuerdo para que el Madrid retenga sus derechos si vuelve a Europa. Un consuelo menor, pues con su potencial parece complicado que no pueda hacerse un hueco entre los mejores del mundo.