ABC (Andalucía)

Corta el pene al dueño del bar después de que este intentase violarla

▸ La mujer, que hacía meses que trabajaba en el local, confesó a los Mossos lo que hizo

- JESÚS HIERRO

A quienes ya peinan canas al leer el titular les llegarán los ecos de la historia de aquella joven ecuatorian­a, Lorena Bobbit, que, en 1993, en Virginia (Estados Unidos), castró a su marido después de haber sufrido un carrusel de maltratos y violacione­s. En unas latitudes bien distintas, la localidad barcelones­a de Sant Andreu de la Barca, la madrugada del lunes al martes sucedió un episodio, que, en lo esencial, tiene muchos puntos en común: una mujer, en este caso trabajador­a de un bar, le cortó el pene al dueño del establecim­iento, supuestame­nte, como en el caso del matrimonio Bobbit, tras varios episodios de acoso y agresiones sexuales.

Ocurrió sobre las dos de la madrugada de la noche del lunes al martes, cuando el bar El Sibarita, que el hombre había abierto hace unos meses en la localidad, ya había bajado la persiana. El dueño del establecim­iento se presentó en la comisaría de la Policía Local sangrando, gravemente herido. Casi de inmediato, hizo acto de presencia en las instalacio­nes policiales la mujer, que reconoció haber sido ella la autora de la agresión, y aseguró a los agentes que le había cortado el miembro después de que el hombre hubiese intentado violarla.

No era la primera vez que él le obligaba y forzaba a mantener relaciones sexuales no consentida­s, según explicó la mujer a los agentes la misma noche, tal y como trasladó luego a los medios el responsabl­e de la comisaría de los Mossos d’Esquadra en Martorell (Barcelona), el inspector Óscar Carreras. Tanto él como ella son de mediana edad y naturales de Bangladesh. Por el bar y su entorno se les veía siempre juntos, con lo que algunos vecinos pensaban que podían ser pareja. A los Mossos d’Esquadra, sin embargo, al cierre de esta edición, no les constaba que el hombre y la mujer mantuviera­n una relación sentimenta­l. Y tampoco que ella hubiese presentado contra él denuncia alguna sobre supuestas agresiones sexuales anteriores.

Operado de urgencia

Después de los hechos, la mujer quedó detenida acusada de un supuesto delito de lesiones. El hombre fue ayer mismo operado en el Hospital de Bellvitge (Barcelona), y se encuentra en condición de investigad­o por las supuestas agresiones sexuales, aunque no detenido. Ahora, el primer objetivo de la división de investigac­ión de los Mossos d’Esquadra, según detalló el inspector Carreras, será averiguar qué fue lo que ocurrió aquellas horas dentro del bar. Aclarar si la mujer amputó los genitales del dueño del establecim­iento en defensa propia.

En aquel circo mediático en el que en su momento se convirtió la historia del matrimonio Bobbit –sobre el que hace un par de años una conocida plataforma digital estrenó una serie documental– prácticame­nte lo único que retumbaban eran los chascarril­los sobre la amputación del miembro. En aquel caso –era otra época– la violencia sexual y doméstica que había precedido a la reacción de la mujer quedó sepultada en el imaginario colectivo por el chiste fácil y la gracieta. Pero detrás había habido un rastro de casi un lustro de malos tratos, que acabaron en tragedia. Cuando Lorena, una noche, cogió un cuchillo en la cocina y como venganza cortó el pene al exmarine John Bobbit mientras dormía.

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