Un exmarine preso en Rusia pide un canje de prisioneros
El americano encarcelado en Mordovia por espionaje reclama al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que negocie con su homólogo ruso, Vladímir Putin, un intercambio de reclusos
El ex infante de Marina norteamericano Paul Whelan, condenado por ‘espionaje’ en junio del año pasado a 16 años de prisión en una colonia de ‘régimen severo’ de la región rusa de Mordovia, se ha dirigido al presidente estadounidense, Joe Biden, solicitando que inste a su homólogo ruso, Vladímir Putin, a llevar a cabo un «intercambio de presos». Biden y Putin tienen previsto mantener su primera cumbre presencial en Ginebra el próximo 16 de junio. Whelan ha podido hacer declaraciones al canal de televisión CNN desde la prisión en Mordovia, a unos 500 kilómetros al sureste de Moscú, donde se encuentra recluido. Asegura ser una víctima de lo que define como «diplomacia de los rehenes».
Él mismo se considera un «rehén» capturado en Rusia, no porque se dedicase al espionaje, algo que siempre ha negado, sino como posible objeto de canje con alguno de los reclusos rusos que cumplen condena en Estados Unidos. En particular, el traficantes de armas, Víctor But, ‘el mercader de la muerte’, o Konstantin Yaroshenko, condenado por la Justicia estadounidense por cargos de contrabando de estupefacientes.
«El secuestro de un ciudadano estadounidense no es aceptable en ningún lugar del mundo», considera Whelan. A su juicio, «no es conmigo con quien Rusia tiene un problema, es con EE.UU., y EE.UU. necesita resolver este caso de diplomacia de rehenes y resolverlo lo antes posible (...) así que le pido al presidente Biden que discuta activamente esto y lo resuelva con sus interlocutores rusos». «Lo que espero es que sea rápido», subrayó. Su hermano gemelo, David Whelan, cree que en Moscú hay interés en llegar a un acuerdo con Washington que suponga la liberación mutua de presos para que But y Yaroshenko puedan también regresar a sus casas.
Whelan, de 51 años y con nacionalidad estadounidense, canadiense, británica e irlandesa, fue detenido en Moscú, en el hotel Metropol, el 28 de diciembre de 2018, según el Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB), tras haber recibido un dispositivo USB con una lista de agentes de un departamento de los servicios secretos rusos. El acusado siempre defendió que no se trataba de ninguna lista de espías, sino de las fotografías de una viaje turístico a la localidad cercana a la capital rusa de Serguéyev Posad, famosa por su bello monasterio ortodoxo.
Pero la Justicia rusa sostiene que el exmarine, que tiene conocimientos de lengua rusa, llevaba años contactando con ciudadanos rusos que conocía en las redes sociales y estuvo antes varias veces en Rusia. Según su hermano David, viajó a Moscú en diciembre de 2018 para acudir a la boda de un amigo.