Odios raciales y policiales en la feliz Dinamarca
‘SHORTA. EL PESO DE LA LEY’
Intérpretes: F. L. Hviid y A. Ølholm. Intérpretes: Jakob Ulrik Lohmann, Simon Sears, Tarek Zayat...
El último cine danés tiene toque para el thriller y, en el caso de esta película, más que toque es un porrazo con un bate de béisbol. Un policíaco duro, seco y de respiración ruidosa que pone en juego varios elementos que están en plena y mala digestión en la urbe actual▶ la agresividad del gueto, el miedo y el abuso policial y la cohabitación entre razas y culturas. El argumento puede parecer convencional porque está más vivido que el día de ayer▶ la brutal agresión a un joven inmigrante, los disturbios violentos en el barrio multirracial de Svalegarden, la cautela oficial para entrar en ‘territorio apache’ a restablecer el orden y la lucha por la supervivencia de dos policías atrapados en
la tela de araña de ese barrio.
Los directores, también guionistas, construyen la constante y ascendente tensión en modo viaje, y sin separar la acción de los dos policías (y un joven apresado), sus distintos caracteres y su afán de supervivencia en su paseo por el infierno; no se sale de la partitura, poli brutal y malo, poli sensato y equidistante, en esa guerra abierta, ni tampoco renuncia a difuminar la línea que separa el bien del mal y la ley de su excesivo peso y pegada. Sobre el salvaje choque entre ‘nosotros’ y ‘ellos’ sobrevuelan con más interés los conflictos dentro de la misma zona, entre policías que se desprecian y entre apocalípticos e integrados del gueto.
Rodada con brío, con furia, e interpretada con chulería, con soberbia y exigencia física y moral, mantiene al espectador clavado al desarrollo de la trama, aunque algunas soluciones de guion, como el reparto de dignidad, integridad y nobleza entre los personajes, tenga más una función moralista que lógica narrativa.