¿Qué tiene en contra de la gente?
La respuesta está en alguna serie de televisión norteamericana. En algún capítulo habrá visto que cambia el gabinete y ¡santas pascuas!
LO reconozco. No damos abasto. Ya no nos caben más chorradas, disparates o locuras de los socios. No podemos archivar más sandeces (barrancos, plancha, casoplón, la identidad falsa del saharaui o niños, niñas y niñes...). Mi amigo Teo fue tajante▶ «¿Se puede saber qué tiene en contra de la gente?». Y es que lo mismo te tramita unos indultos insultantes, que te esconde con pura demagogia la subida del recibo de la luz. Igual te visita la copia del zulo de Ortega Lara que les da un premio a los asesinos. Lo mismo se esconde de los pitos que mantiene un Consejo de Ministros absurdo.
No damos abasto. No soporta a la gente. Le importa una higa que Biden vaya de la mano de Mohamed VI. No le importa nada pactar tus impuestos con Rufián o la Reforma Laboral con Batasuna. No tiene dignidad para evitar sonrojarse siquiera con el acercamiento a Álava de Soledad Iparraguirre, ‘Anboto’, una de las alimañas más asquerosas que uno pueda imaginar, sólo 48 horas después de hacerse la fotito junto al Rey con gesto compungido. Y falso.
Y se sentará cara a cara con Junqueras. Y Puigdemont volverá a ser candidato tras descojonarse de todos nosotros. Y premiará a los diez etarras asesinos que le quedan mientras Iván Redondo Productions llena los telediarios de verborrea. ¿Tan creído se lo tiene? ¿Tan alejado está de la realidad?
Y aún la responsable será Isabel Díaz Ayuso, cuando la culpa la tienen él y su circunstancia. No debe ser bueno estar rodeado ‘toooodo’ el santo día de pelotas que te aplauden a la vuelta de un consejo europeo o te adoran por lo guapísimo que eres. Lo mismo se derriten a tu paso que aplauden cualquier gili... sandez redactada por un jefe de márketing que se tira por un barranco o se va con quien le pague más.
Mi amigo Teo▶ ¿Qué tiene en contra de la gente?
PD▶ A vueltas con no sé qué remodelación del Gobierno... vete tú a saber qué pasa por la cabeza de Iván y de su principal cliente. La respuesta está en alguna serie de televisión norteamericana. En algún capítulo habrá visto que cambia el gabinete y ¡santas pascuas!