Inflación
Ya la tenemos aquí. Las lecturas de inflación, primero en Estados Unidos y ahora en Europa están siendo más altas de lo esperado. Era previsible pero cuando llega no deja de sorprender. El efecto base por un lado, y por otro la fortísima recuperación de la economía está tirando de los precios para arriba. La primera reflexión probablemente sea que se nos había olvidado lo que es un mundo con inflación. Llevamos muchos años sin presión en los precios y se nos había olvidado gestionar con inflación positiva. Y ¿como se invierte con inflaciones al alza? Bueno no es tan difícil. Aunque se nos haya podido olvidar y los que llevan poco tiempo invirtiendo no lo han visto, ha sido la norma a lo largo de la historia, la excepción, quizá, haya sido lo vivido estos últimos años. La principal consecuencia, como ya estamos viendo, está en los tipos de interés. Los bonos han sido el activo que mejor lo ha hecho en los últimos treinta años como consecuencia de lo que ha pasado con los precios y, aunque seguro que no va a desandar todo el camino andado, no es el sitio en que estar. Las subidas de tipos de interés son bajadas del precio de los bonos. El comportamiento de la renta fija en todas sus versiones ha sido algo extraordinario en los últimos años por lo que debería continuar normalizándose.
En renta variable también tiene consecuencias por como se mueven las valoraciones en función del tipo de descuento. A mayor tipo de descuento menor valor de las compañías de crecimiento y al revés. Este movimiento también ha empezado y debería tener continuidad en los próximos meses a medida que se confirme este escenario. Ahora quizá la duda sea como proteger la cartera ante inflaciones más altas durante más tiempo del que ahora mismo descuenta el mercado. La forma de cubrirse contra esta situación viene a ser un poco más de los mismo. Activos reales, dentro de la renta variable aquellas compañías de sesgo más cíclico como materias primas o las que pueden trasladar mejor las subidas de precios como promotoras inmobiliarias. Además de bancos, que son los que más se benefician de tipos de interés algo más altos durante más tiempo. Por último recordar que hay determinadas economías que se benefician más de entornos inflacionarios como puede ser la española. El mayor peso de la construcción residencial es gasolina en este tipo de entornos. De este tema seguro que vamos a hablar mucho en próximos meses.