Austria desata una fuerte polémica con un mapa interactivo de mezquitas peligrosas
La iniciativa es retirada de internet tras su presentación por el Gobierno debido a la «instrumentalización»
Un islamista desató el terror en las calles de Viena el pasado 20 de noviembre, cuando comenzó a disparar a viandantes al azar mientras gritaba «Alá es grande». Asesinó a cuatro personas antes de ser abatido por la Policía y el Gobierno de Austria reconoció «graves errores» de seguridad en el seguimiento del islam radical en el país, al tiempo que prometió tomar el asunto más en serio en adelante. En cumplimiento de esta promesa, el Ministerio de Interior de Viena presentó una página web interactiva denominada ‘Mapa del Islam en Austria’ (Islam Karte Österreich) que detallaba gráficamente la presencia de esta religión en el país y que permitía no solamente ubicar la localización de cada una de las más de 600 mezquitas y asociaciones musulmanas en suelo austriaco, sino también conocer los nombres de sus responsables y sus eventuales vínculos con el extranjero.
El mapa fue elaborado por la Universidad de Viena, en colaboración con el Centro de Documentación sobre el Islam Político, un organismo creado por el Gobierno de conservadores y verdes para hacer un seguimiento más activo del islam radical en Austria, pero la iniciativa ha recibido críticas y amenazas por parte de quienes consideran que «estigmatiza» a los musulmanes.
El rector de la Universidad de Viena, Heinz Engl, ha terminado distanciándose públicamente del proyecto y forzó la retirada del logo del centro universitario del mapa digital. Ednan Aslan, profesor de Educación Religiosa que desarrolló el mapa, ha requerido protección policial para garantizar su integridad física. Y ante las numerosas amenazas recibidas, el mapa ha sido retirado de la red y sustituido por un comunicado en el que Aslan lamenta su «instrumentalización política».
«Intención de estigmatizar»
«El mapa demuestra una intención manifiesta del Gobierno de estigmatizar a todos los musulmanes como un peligro potencial», se ha quejado el Consejo Musulmán Austriaco, que lee el mapa como «una forma de lanzar sospechas generalizadas contra todos los musulmanes». La asociación Juventud Musulmana de Austria (MJÖ) ha solicitado oficialmente la eliminación de la página web y ha presentado una demanda de protección de datos, mientras estudia medidas judiciales. «Exigimos protección policial inmediata para todas las instituciones, mezquitas y personas afectadas por la publicación de las direcciones», ha declarado su presidente, Sabir Ansari, que protesta porque el mapa contenía direcciones privadas, dado que hay casos en los que los representantes de las asociaciones carecen de una sede oficial y se registran bajo su propio domicilio.
La ministra de Integración, Susanne Raab, ha respondido sin embargo que la intención no es «culpar» a una religión, «sino desenmascarar ideologías que cuestionan y socavan los valores de la democracia liberal escondidas detrás de prácticas religiosas» y ha sugerido que internet está poblado de mapas de asociaciones de cualquier tipo, o de proveedores de servicios y productos, sin que nadie se sienta perseguido por ese motivo. «Es una herramienta de transparencia que ayudará a los musulmanes, que muy cómodamente pueden encontrar qué mezquita tienen más cerca y qué ideología hay detrás», ha rebatido Raab.
El canciller austriaco, Sebastian Kurz, ha preferido ahora no entrar en la polémica, pero no tuvo reparos después del atentado de noviembre en definir el ‘islam político’ como un delito a perseguir que «no tiene ningún espacio en la democracia austriaca». Una semana después del ataque anunció un paquete de medidas que incluía la creación de un directorio de imanes que permita un mayor control contra la ideología extremista y de instrumentos para un más preciso seguimiento de la actividad extremista a cuyo desarrollo pertenece el mapa. «Si un infractor de la ley mentalmente anormal puede ser encerrado de por vida porque es una amenaza, entonces un terrorista que es una amenaza también puede ser encerrado de por vida», avanzó una reforma del Código Penal, tras calificar a los extremistas de «bombas de tiempo» y justificar la obligatoriedad de los brazaletes electrónicos para los que no estén bajo custodia.
Un proyecto ya en marcha
La oposición acusa a Kurz de lanzar como nuevo un proyecto que en realidad tenía años de antigüedad. El mapa interactivo había sido desarrollado anteriormente por un equipo académico con fines de investigación y lo único que se ha hecho ahora, añaden, es actualizar los datos de acuerdo a la información reunida por el Centro de Documentación sobre el Islam Político.
Los socialdemócratas (SPÖ) y Los Verdes, socios de Kurz en el Gobierno de coalición, cuestionan el proyecto porque, aseguran, «confunde islam con islamismo». Para Juventud Musulmana, es «un ejemplo peligroso de sospecha generalizada contra los musulmanes» y la organización celebra su retirada de internet.