La Justicia ordena que la Selectividad catalana se haga también en castellano
Las pruebas, que empiezan hoy, deberían repartirse en las tres lenguas oficiales
Segundo toque de atención de los tribunales a la Generalitat por discriminar al castellano en la enseñanza. El pasado 21 de abril y en respuesta a un recurso interpuesto por la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB), el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) instó al departamento de Educación a adoptar con carácter inmediato las medidas necesarias para que los alumnos catalanes pudieran realizar las pruebas de competencias básicas de sexto de Educación Primaria «en la lengua de su elección» y no solo en catalán como llevan haciéndose desde hace años.
Ahora, el mismo tribunal dicta similares medidas «con carácter de urgencia» para la Selectividad catalana, que empieza hoy y a la que están convocados 40.000 estudiantes. Apenas 24 horas antes del inicio de las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU), la Justicia da un giro en el guion impuesto desde hace años por la Generalitat para la realización de las pruebas al ordenar que, por primera vez, los cuestionarios estén disponibles para los examinados en las tres lenguas oficiales en la comunidad: catalán, castellano y aranés.
Medidas cautelares urgentes
El tribunal catalán responde así al recurso presentado el pasado viernes por la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) y adelantado por este diario en el que la entidad exigía «medidas cautelares urgentes» para que se modifiquen las directrices que el Govern da para la realización de las pruebas al considerarlas «discriminatorias» para los alumnos castellanohablantes. Hasta ahora, según establecen las instrucciones que los vocales de los tribunales reciben del Consejo Interuniversitario de Cataluña (CIC) –concretamente, el párrafo tercero del punto 1.2.2. de las mismas–, los enunciados de las PAU se repartían por defecto en catalán, y de forma residual («…solo si algún alumno lo pide…») en castellano. La entidad arguyó en su recurso que esas instrucciones «vulneran derechos fundamentales de los alumnos» y recordó que los estudiantes «tienen el derecho reconocido a examinarse en la lengua que deseen, siempre que sea oficial». En un auto emitido ayer, que marcará un antes y un después en la Selectividad catalana, el TSJC avala la petición de la AEB al entender que «concurren circunstancias excepcionales y de urgencia que justifican» las medidas cautelares. Los jueces justifican la decisión porque «la elección de lengua de los exámenes no puede estar determinada por la Administración».
Siguiendo este precepto, el tribunal dispone que «los exámenes deberán estar disponibles en las tres lenguas cooficiales y se ofrecerá de manera individual al alumno la opción de escogerlos en el idioma oficial que estime». Aclara, sin embargo, que quedan fuera de esta orden los exámenes de Lengua Catalana, Castellana y Extranjera, que «tendrán los enunciados en el idioma evaluado». El Tribunal de Justicia catalán insta al presidente y secretario del CIC a que «disponga lo necesario para la ejecución de lo acordado».
Finalmente, emplaza a la Generalitat y a la Fiscalía a que efectúen alegaciones en un plazo de tres días. Transcurrido ese plazo, se dictará auto resolviendo sobre el levantamiento, mantenimiento o modificación de la medida. Para ese momento, la Selectividad de junio habrá ya finalizado. Ana Losada, presidenta de la AEB, celebraba ayer el auto como «una forma de hacer justicia tras 20 años de discriminación al alumnado». La entidad espera que en septiembre «haya ya un único examen con los enunciados en las tres lenguas oficiales para que el alumno elija lengua sin significarse».