Daniel Ortega prosigue la purga de rivales para las próximas elecciones
En tres semanas, el régimen ha detenido a cuatro precandidatos a la Presidencia de Nicaragua
El régimen sandinista de Daniel Ortega ha emprendido una «cacería» contra los candidatos opositores a las elecciones del próximo 7 de noviembre. Así define la prensa independiente de Nicaragua lo que desde hace tres semanas está sucediendo en ese país, tras la la detención de cuatro precandidatos a la Presidencia. A esto se suma la citación por parte de la Fiscalía de decenas de periodistas y dueños de medios de comunicación para declarar como testigos en la investigación abierta contra la precandidata Cristina Chamorro (hija de la expresidenta Violeta Chamorro), la principal rival de Ortega, según las encuestas, y que ha sido inhabilitada y actualmente se encuentra en arresto domiciliario.
Durante este tiempo también han sido bloqueados o ilegalizados dos partidos políticos, el PRD y el Partido Conservador, por parte de un Consejo Supremo Electoral formado por magistrados afines al régimen... Todo ello en apenas 21 días, cuando todavía restan cinco meses para los comicios a los que Ortega se presenta para su tercera reelección consecutiva como presidente, tras haber ostentado ya el poder en un periodo anterior (1985-1990).
Cada día son varios los opositores convocados por el Ministerio Público, por lo que alguno, como Félix Maradiaga, ha optado, ante la incertidumbre del desenlace, por dejar el testimonio de su detención por adelantado. «Hermanos y hermanas nicaraguënses, si están viendo este vídeo es porque fui detenido por el régimen de Ortega». Así comienza una grabación realizada por Maradiaga horas antes de acudir a una citación de la Fiscalía este martes, entrevista tras la cual fue arrestado. Según un comunicado emitido por la Policía, el opositor «está siendo investigado por actos que menoscaban la independencia del pueblo», de conformidad con la Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo, a la Independencia, a la Soberanía y Autodeterminación para la Paz. Dicha ley, conocida popularmente como ‘Ley Guillotina’, fue aprobada el pasado mes de diciembre con el objetivo de bloquear las candidaturas de la oposición a las elecciones del mes de noviembre.
«Mis manos están limpias. Mi conciencia está limpia, al igual que la de los 130 presos políticos que resisten desde las mazmorras en prisión de conciencia simplemente por pensar diferente. Al igual que Cristiana Chamorro, desde su arresto domiciliario, al igual que el doctor Arturo Cruz», afirma Maradiaga en la grabación, en relación a las detenciones de Chamorro, como consecuencia de una investigación por presunto lavado de dinero a través de la Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH), que la precandidata a calificado de «farsa»; así como la del exdiplomático Arturo Cruz, que regresaba de una gira por EE.UU. cuando fue retenido en el aeropuerto de Managua, y que también ha ido acusado por infringir la ‘Ley Guillotina’. Según la ONG Human Rights Watch, este último, que estará bajo arresto al menos 90 días, habría sido ingresado en el penal de El Chipote, conocido por sus torturas.
Eliminar obstáculos
En la grabación, Maradiaga hace un llamamiento a los nicaragüenses para mantener la tranquilidad en un país que ya sufrió un estallido social en 2018 que dejó 325 muertos. «No caigamos en las provocaciones del régimen, que está desesperado porque le tiene terror, le tiene temor a la voluntad soberana de la ciudadanía, y no se quiere someter a un proceso electoral libre y justo. Ni siquiera a un proceso electoral amañado bajo sus propias reglas», indica el opositor, en clara referencia a la perversión de los instrumentos democráticos realizada en las últimas semanas. A la aprobación de varias leyes el año pasado para cerrar el camino a la oposición, el pasado mes de mayo el Parlamento, con mayoría sandinista, aprobó los nombramientos del Consejo Electoral, formado por mayoría de miembros afines; así como una reforma electoral que perjudica a la oposición, y en la que no se contempla la presencia de observadores internacionales en los comicios.
Maradiaga continúa, en el vídeo, pidiendo que «no perdamos la batalla de la esperanza, batalla fundamental en la que tenemos que tener una fe de hierro en que Nicaragua será libre, en que vamos a encontrar un camino de paz y de justicia». Y vuelve a insistir: «No caigamos en provocaciones de violencia de un régimen que solo sabe utilizar las armas para imponer su voluntad».
Los arrestos no acabaron el martes con el de Maradiaga, que también ha sido ingresado en El Chipote. Horas después y tras el allanamiento de su vivienda, Juan Sebastián Chamorro, primo de Cristiana Chamorro y precandidato de la Alianza Ciudadanos por la Libertad, era también detenido, convirtiéndose en el cuarto precandidato apeado de la carrera presidencial por el régimen de Ortega (al menos al cierre de esta edición). Fue arrestado bajo la acusación de «incitar a la injerencia extranjera en asuntos internos» y «organizarse con financiamiento de potencias extranjeras para ejecutar actos de terrorismo», entre otros, según la Policía nicaragüense.
La comunidad internacional –incluido el Ejecutivo español, ahora que ya no está en él Pablo Iglesias– ha pedido la liberación de los opositores y la celebración de elecciones transparentes y justas. EE.UU. anunció ayer más sanciones contra cuatro funcionarios del régimen sandinista «por apoyar los esfuerzos de Ortega para socavar la democracia, los derechos humanos y la economía», afirma el Departamento del Tesoro en un comunicado.
Maradiaga: «No caigamos en provocaciones de violencia de un régimen que solo sabe utilizar las armas para imponer su voluntad»