Reino Unido sopesa limitar el contacto social hasta el 19 de julio
CORRESPONSAL EN LONDRES
Reino Unido tiene vacunada a más del 60 por ciento de su población. Pero comienza a replantearse ahora si la estrategia de haber vacunado de una sola dosis de AstraZeneca a la mayoría de la ciudadanía, aplazar la segunda y exponerse en ese tiempo a la reformulación del virus en nuevas variantes ha sido la mejor. El Ejecutivo de Boris Johnson da visos de opinar que no y el próximo lunes podría redefinir su plan de desescalar el país y retrasar en otro mes (cuatro semanas) la apertura de ciertas actividades. La razón se llama Delta, la variante india, que ha disparado los contagios en la última semana (hasta los 42.323, 29.892 más que la semana anterior), aunque no es responsable –por esa misma campaña de inmunización– de un preocupante volumen de fallecimientos u hospitalizaciones (aunque estas últimas están al alza).
Según pudo saberse ayer, fuentes de Downing Street indicaron a la cadena BBC que no se ha tomado una decisión, pero que el Gobierno, metido de lleno en la celebración del G-7, está sopesando este fin de semana varias opciones. Además, los periódicos ‘Times’ y ‘The Sun’ informaron también de que los ministros estaban considerando la demora de la relajación de medidas, después de haber ido flexibilizando gradualmente las restricciones. Pero el levantamiento de las últimas medidas, previsto inicialmente para el 21 de junio, se ve amenazado por el reciente aumento de los contagios, que superan los 6.000 y 7.000 nuevos casos diarios.
El premier manifestó ayer una «seria preocupación» por el aumento de las infecciones de la variante, un 60 por ciento más contagiosa. Johnson debe anunciar el lunes si mantiene las limitaciones al contacto social o las mantiene hasta el 19 de julio.