ABC (Andalucía)

‘El Melillero’ se reía mientras quemaba a su exnovia con ácido

- J. J. MADUEÑO

Durante cuatro horas, Sandra, la exnovia del ‘Melillero’ a la que supuestame­nte abrasó con ácido en Cártama el pasado 12 de enero, se sentó ante la titular del Juzgado de Violencia de la Mujer 3 de Málaga para narrar su relación con su presunto agresor, así como el brutal ataque que sufrió junto a su amiga Cristina. Esta segunda chica ya declaró ante la Guardia Civil y en el Juzgado anteriorme­nte.

La chica de 26 años se presentó con quemaduras en el 20 por ciento de su cuerpo, que le hicieron estar en estado crítico en la Unidad de Grandes Quemados del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Allí le salvaron la vida, después de que descargara­n sobre ella un bote de un litro de ácido sulfúrico puro al 99 por ciento.

Es uno de los detalles que contó en el juzgado ante su abogado y los letrados defensores de los detenidos, dos de ellos, el ‘Melillero’ y ‘Poti’ como supuestos autores materiales del ataque. Sandra contó cómo había sido su relación de pareja y cómo fue aquel ataque, del que dijo recordar las risas del exnovio cuando estaba siendo abrasada por el líquido corrosivo.

Según la investigac­ión de la Guardia Civil aportada al juzgado, el ‘Melillero’ y un secuaz apodado ‘Poti’ siguieron el Mini blanco de Sandra hasta Cártama, donde le dieron alcance. La Guardia Civil descubrió que le habían instalado balizas GPS a los coches de Sandra y Cristina para tenerlos localizado­s en todo momento y en tiempo real. Así, dieron alcance a las dos chicas en un paso de peatones de Cártama y, con el ‘Melillero’ dentro del Volkswagen Golf con el que las seguían, el otro salió y les descargó el bote de ácido para quemarlas. ‘Poti’ reconoció los hechos en el tribunal y dijo que lo había hecho obligado por el ‘Melillero’, que con esa acción le perdonaba una deuda de droga.

Juicio pendiente

Eran dos delincuent­es habituales, en el caso del ‘Melillero’ con varias cuentas pendientes. Una de ellas tiene fijada la vista oral para este miércoles el Juzgado de lo Penal 5 de Málaga. Se le acusa de amenazar con una pistola a un camarero en Torremolin­os en 2018. La Fiscalía le pide un año de prisión. Según eel fiscal, el acusado fue al establecim­iento de ocio, situado en el paseo marítimo, que se encontraba ya cerrado al público y esgrimió una pistola plateada frente a uno de los empleados.

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