‘1971’, el año en el que la música logró cambiar el mundo
Una miniserie documental de Apple analiza la impronta de la música setentera
Atrevido título, el de ‘1971, el año en que la música lo cambió todo’. Asegurar que las canciones populares de ese año tuvieron más influencia que las de cualquier otro es arriesgado. Especialmente teniendo en cuenta todo lo que había ocurrido en el lustro anterior. Pero los esfuerzos analíticos, de contextualización y de documentación de esta serie de ocho capítulos son dignos de ovación. Eso sí, debería llevar el subtítulo de ‘en EE.UU. e Inglaterra’.
Dirigido por el mismo equipo que firmó películas como ‘Amy’, ‘Exit Through the Gift Shop’ y ‘Senna’, y basado en el libro «1971: Never a Dull Moment», de David Hepworth, el documental desgrana los acontecimientos políticos, sociales y económicos del arranque de los setenta y los conecta con una banda sonora que incluye ‘Gimme some truth’ de John Lennon, ‘Won’t get fooled again’ de The Who, ‘Right off’ de Miles Davis, ‘One of these days’ de Pink Floyd y un larguísimo etcétera de ‘hits’.
«Si soy tan bueno, tengo que usarlo para influir en la vida de la gente», dijo Marvin Gaye. Sin duda consiguió su objetivo, pero su frase hace pensar en la única pega que se le puede poner al documental. ‘1971’ no acaba de indagar a fondo en los efectos que la música tuvo en los movimientos ni en los cambios sociales.
Obviando ese pequeño pero importante detalle, sólo se puede hacer una valoración sobresaliente de ‘1971’, ya que da con muchas de las claves que convirtieron a los compositores pop en sujetos políticos. Una de ellas, probablemente la más importante, es el impacto que tuvieron las imágenes de la guerra de Vietnam en televisión.
Robert Greenfield, periodista de ‘Rolling Stone’, también revela la otra cara de la moneda en este proceso de concienciación. «1971 fue el año en que comprendí que no hay que seguir a las rock-stars». Los músicos empezaron a consumir drogas menos psicodélicas, más conectadas con la realidad, y se les fue de las manos. Como sentencia Jerry Martini: «Te dirán que la mayoría de rupturas de bandas fue por esto, por aquello o por lo de más allá. Pero fue por la cocaína».