La República Checa se beneficia de la roja a De Ligt para acceder a cuartos
Una de las grandezas del fútbol es la igualdad de clases cuando llegan las eliminatorias directas. Lo comprobó Italia este pasado sábado, en el que tuvo que sudar sangre para eliminar a Austria, y ayer lo sufrió Países Bajos, otra de las grandes favoritas para conseguir la Eurocopa, aunque con diferente suerte. Holes y Schick mandaron a casa la selección ‘oranje’, que se vio penalizada por la expulsión de De Ligt en el inicio de la segunda parte. Los checos se medirán el próximo sábado a Dinamarca (eliminó a País de Gales con un rotundo 0-4) en Roma.
Una falta del central de la Juventus, que trabó a Mesopust y tocó el balón con la mano, fue analizado por el VAR después de que el ruso Sergei Karasev solo lo sancionara con cartulina amarilla. Rectificó el colegiado tras ver las imágenes en el monitor y cambió el color de su tarjeta, expulsando a De Ligt (min. 54) al entender que era el último defensor en una ocasión manifiesta de gol. Se descompuso el equipo de Frank de Boer, que tampoco había sido capaz de mostrar su superioridad sobre el césped del Puskas Arena de Budapest.
La tela de araña tejida por Jaroslav Silhavy maniató a De Jong en la primera parte e impidió la creatividad neerlandesa. Países Bajos llevaba la iniciativa pero sin consecuencias y las ocasiones las ponían los checos, cuya base llevaba el nombre del Slavia de Praga. Aprovecharon el desconcierto de su rival después de la expulsión de De Ligt para golpear en su línea de flotación. Primero fue Holes (min. 68) al beneficiarse de una indecisión de la defensa ‘oranje’ y once minutos después llegó el turno de Schick, que sentenció al culminar un excelente contraataque.