Vox y Cs animan al PP para una moción de censura que sea un plebiscito por los indultos
El partido de Abascal insiste en que los populares deben liderarla y Arrimadas la apoyaría ahora
La posibilidad de una nueva moción de censura contra Pedro Sánchez gana adeptos como una suerte de plebiscito al Gobierno por los indultos a los condenados del ‘procés’. La aritmética parlamentaria hace prever un nuevo fracaso casi con total seguridad, pero quienes defienden su idoneidad en este momento consideran que es una oportunidad para que cada una de las fuerzas en el Congreso se posicione y se retrate sobre la medida de gracia. Si bien el PP parece no estar por la labor, en Vox insisten en que han de ser ellos quienes lideren esta iniciativa. Ciudadanos (Cs) ya ha dicho que ahora votaría a favor, siempre que la encabece Pablo Casado.
El partido de Santiago Abascal reiteró ayer la «necesidad» de someter a Sánchez a otra moción. De nuevo trasladó toda la presión a Casado, sin plazos, pero con la advertencia de que si él no da el paso, lo hará Vox. «Vamos a darles tiempo», declaró el eurodiputado y vicepresidente de Acción Política del partido, Jorge Buxadé, que invitó a los populares a «reflexionar» en torno a esta cuestión.
Las palabras de Buxadé llegaron horas después de que Cs asegurase que apoyaría una eventual moción del PP, una posición que contrasta con la que defendieron en octubre de 2020, cuando Santiago Abascal hizo lo propio con los únicos apoyos de sus 52 diputados. «Bienvenidos todos los que se acercan a Vox y bienvenidos todos los que votaron en contra de la moción de censura de Santiago Abascal», dijo, aunque desconfiado ante la formación naranja por ser «el partido menos fiable de España». «Es el PP quien debe mostrar un mínimo de valentía», añadió.
Sin fecha a la vista
La postura de Vox es la misma que en los últimos días. Insta al PP a que asuma la responsabilidad como primer partido de la oposición, pero aguarda para pasar a un primer plano si lo rechaza. Aunque no han dado una fecha, ni siquiera estimada, fuentes del partido reconocen que si el Constitucional declara ilegal el primer estado de alarma, sería un argumento más que suficiente para tramitar la medida. Más allá del resultado, señalan, serviría para que la Cámara Baja juzgase el papel del Gobierno en dos asuntos capitales y de extrema gravedad: los indultos a los políticos presos por el 1-O y un encierro inconstitucional. «Sabemos que las reflexiones en el PP son lentas y tediosas», repitió Buxadé sobre el margen que ofrecen, en alusión a las supuestas diferencias entre sus líderes regionales.
El PP, no obstante, no ha recogido el guante en ningún momento. Justamente lo contrario. El secretario general del partido, Teodoro García Egea, lanzó un mensaje a Ciudadanos en sus redes sociales, deslizando que la moción no está en su hoja de ruta en este momento. «Las mociones de censura a Sánchez se hacen evitando entregar ayuntamientos como el de Murcia o romper gobiernos regionales para dárselos al PSOE y Podemos», publicó junto a una captura de las declaraciones de Arrimadas sobre sus planes. La exigencia de Casado, como publicó ABC, es que Sánchez convoque elecciones.
Pero Cs ha cambiado de parecer sobre la conveniencia de lanzar una moción de censura contra el Gobierno, aun a sabiendas de que no puede prosperar. Si en otoño del año pasado los liberales criticaban «la pérdida de tiempo» a la que abocaba Abascal, ahora apremian a Casado a liderar una iniciativa condenada al fracaso. Fue Arrimadas este sábado, en una entrevista en ‘El Mundo’, quien marcó la pauta.
Anteayer, el portavoz nacional y vicesecretario general, Edmundo Bal, consolidó la nueva apuesta de Cs: «No sé qué más tiene que pasar para que Sánchez se dé cuenta de que está humillando a nuestro país». Los indultos a los condenados por sedición y malversación, a su juicio, son «la gota que colma el vaso». Cs presentó ya el pasado jueves sendos recursos contra las medidas de gracia otorgadas a los cabecillas del ‘procés’, aunque de momento el Tribunal Supremo rechazó ayer las cautelarísimas que solicitaban.
Casado, sí; Abascal...
El cambio de posición respecto a la moción de censura se fundamenta sobre dos pilares. Por un lado, el año pasado Cs todavía negociaba con el Ejecutivo los Presupuestos Generales del Estado y mantenía el idilio que comenzó con las prórrogas de los estados de alarma; por otro, para Arrimadas no es lo mismo votar a favor de una investidura de Abascal –aunque esté condenada al fracaso– que de Casado. En la estrategia con la que salió victoriosa de la V Asamblea General de Cs, los «populismos» son línea roja.
Fuentes de la dirección consultadas por este periódico afirman además que una moción de censura no se puede presentar «para dar la nota», sino que debe tener una razón fundamentada y de peso. Si Cs respaldaba la línea de acción –en rasgos generales– del Ejecutivo con la pandemia, en ningún caso puede bendecir la concesión de los indultos.
Cs ya terminó votando en contra de los Presupuestos tras el pacto del Gobierno con ERC y con EH Bildu, pero la relación pareció restablecerse con la moción de censura fallida en la Región de Murcia, con la que el PSOE y Cs intentaron desbancar al PP. Sin embargo, el tono de Arrimadas y del resto del partido se ha endurecido en los últimos meses, e internamente se asume que el perdón a los sediciosos supone un antes y un después.
«Las mociones de censura a Sánchez se hacen evitando entregar ayuntamientos como Murcia»
«Es el PP quien debe mostrar un mínimo de valentía, vamos a darles tiempo para reflexionar»
«Lo de los indultos a los golpistas es la gota que colma el vaso. Vivimos un momento grave»