La sonrisa incompleta de una España al alza
► La idea de Luis Enrique, que se ha impuesto en casi todos los debates, sale reforzada de esta Eurocopa ► Pedri y Olmo personalizan el triunfo de los jóvenes en un equipo en donde se ha impuesto el valor del grupo
Ya pasada la medianoche, y con la rabia acumulada por el cruel desenlace, los perfiles de los jugadores de España en sus redes sociales, que es donde más a gusto se encuentran para lanzar una idea, se inundaron de mensajes de agradecimiento, qué paradoja. Todos lamentaban el injusto adiós ante Italia, pero también todos hablaban de equipo, en mayúsculas, y de orgullo, que es lo que ha transmitido esta selección en la Eurocopa del coronavirus. España se va en semifinales, pero queda la sensación de que algo bueno se está cocinando, ansiosos los protagonistas para que llegue cuanto antes el Mundial de Catar. Hay equipo y hay futuro, dos de las principales conclusiones de este mes y pico de convivencia, risas y momentos de fútbol brillante, si bien no todo ha sido tan bonito. En cualquier caso, se puede decir que hay más certezas que dudas.
Luis Enrique Ganador de casi todos los debates
El primero, y eso que su figura siempre despierta a los extremos, es el de Luis Enrique, ganador de esta Eurocopa porque ha conseguido enchufar a España, tanto al equipo como al país. De lo primero no cabe duda, se hablará en adelante, y puede que en lo segundo haya quien difiera un poco y que interprete los números a su manera. Habrá quien diga que España, en 90 minutos, solo ha ganado a Eslovaquia, y tendrá toda la razón. Podrá decir también que los dos primeros partidos fueron de aquella manera y que contra Suiza, en cuartos, el tono fue gris, y tendrá toda la razón. Pero se le podrá rebatir diciéndole que España ha sido siempre fiel a lo que propuso y que dominó, con excepciones momentáneas, todos los partidos de esta Eurocopa. Contra Italia, jugó un partido notable, y quizá por ser el último es mejor quedarse con ese recuerdo.
Estilo Innegociable manera de entender el fútbol
Si hay algo que caracteriza a esta selección, como a casi todas las últimas, es la necesidad de tener el balón. Sin embargo, Luis Enrique ha reforzado esa premisa y le ha añadido otras virtudes al juego del equipo. Se presiona muchísimo y muy arriba, con chicos que tienen unas piernas fresquísimas. Se busca algo más de verticalidad, aunque no siempre es posible. La defensa, avanzada, asume tantos riesgos como el portero y queda resolver el problema endémico de la puntería. Paradójicamente, España ha acabado con 13 goles, su récord en una Euro.
Jóvenes La consagración de unos chicos con futuro
Lo más importante de este torneo es, seguramente, la consagración de unos jugadores a los que muy poca gente le ponía cara y que ahora son incuestionables. Por encima de todo, por ser el guardián de las esencias y promover todo lo que siempre ha querido ser España, está Pedri, al que le llueven los elogios con todo el sentido. Su Eurocopa ha sido importante, de menos a más, y
se entiende que el futuro está en sus pies. Tiene 18 años y da la sensación de que casi todo lo hace bien, a la espera de mejorar algo en el remate. Con él ha brillado Dani Olmo, qué decir de su partidazo ante Italia. Pocas exhibiciones se recuerdan como la suya en los últimos tiempos, un pelotero que es ideal para este sistema de Luis Enrique. Por lo demás, ya se puede decir que, pese a todo, la portería entierra el debate con Unai Simón y Laporte, fichado con prisas para la causa, es un central de nivel altísimo. Le queda, eso sí, encontrar una pareja definitiva de baile, pues Eric García y Pau Torres todavía están verdes, aunque el segundo tiene mejor pinta. Y no hay que olvidar a Ferran o a Sarabia.
Grupo Una familia sin una sola grieta
Con mucho, lo más repetido en todas estas semanas ha sido lo del equipo unido, la piña, el todos a una… España ha transmitido una imagen de unión pocas veces vista, no hay ni una polémica que rescatar. Es muy difícil que en una Eurocopa no haya algo, una mala cara por no jugar, un roce por una decisión errónea, algún desplante al entrenador por no estar de acuerdo con su decisión… España ha ido a una, y no es algo habitual. Se ha hecho fuerte desde la adversidad, contundente el grupo para apoyar a Morata cuando hubo sospechas sobre el delantero y sensible para apoyar a Busquets con su positivo. Aunque a veces los mensajes podían parecer impostados, desde dentro se sostiene que la convivencia ha sido impresionante.
Veteranos Implicación total de los más expertos
La mezcla de España ha funcionado muy bien. Con una plantilla bisoña, sin el líder que era Sergio Ramos, entre todos llenaron ese vacío, si bien hay quien alzó más la voz. Sergio Busquets, que dejó en el aire su continuidad, ha hecho un muy buen torneo en el campo y en el vestuario y le han acompañado veteranos como Koke, Alba o Azpilicueta.
Apenas se ha hablado de Sergio Ramos y su liderazgo se ha suplido con la fuerza colectiva y el tirón de los más veteranos