El sector cárnico, en pie de guerra por la cruzada anticarne de Garzón
El titular de Consumo choca con Agricultura como ocurrió ya con la implantación del etiquetado ‘Nutriscore’ y la campaña «el azúcar mata»
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, volvió ayer a estar en el ojo del huracán por la campaña para disminuir el consumo de carne▶ una iniciativa que provocó la indignación del sector cárnico y una tormenta política dentro del Gobierno de coalición. Hasta tal punto subió la polémica durante el día, que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, optó por una frase lapidaria para desautorizarle y se posicionó sin ambages con el ministro de Agricultura, Luis Planas, quien tachó la iniciativa de «errónea»▶ «Donde me pongan un chuletón al punto… eso es imbatible», aseguró Sánchez desde Letonia.
Lo que sí consiguió la iniciativa de Garzón fue unir al sector cárnico en un unánime rechazo▶ las seis organizaciones interprofesionales del sector (Asici, Avianza, Intercun, Interporc, Interovic y Provacuno) enviaron a última hora del miércoles una carta abierta al titular de Consumo y, posteriormente, en un comunicado ayer, pidieron la retirada de la campaña del Ministerio de Consumo. En concreto, tacharon todas las declaraciones del ministro de «irresponsables e impropias». Además, aseguraron, que la cadena ganadero-cárnica siempre ha defendido «una dieta variada, equilibrada y completa».
Las diferentes patronales puntualizaron algunos de los datos aportados por Garzón en la campaña. Por ejemplo, las seis interprofesionales desmintieron que se trate de un sector controlado por grandes empresas. En concreto, añadieron, hay más de 2.750 empresas en este sector y la mayoría son pymes. «El número de explotaciones ganaderas supera el medio millón, conformadas mayoritariamente por empresa familiares», explican en su nota. También destacaron que el 90% del agua que se usa para producir un 1 kg de carne es de lluvia y solo un 10% es agua «gris» o que tampoco son los causantes del 14,5% de las emisiones en España. Según el Ministerio de Transición Ecológica, serían los responsables del 7,8%. Muy lejos del transporte (27%) o la industria (19,9%).
De igual modo, todas estas organizaciones recordaron que el año pasado presentaron una serie de compromisos medioambientales para 2023 como la reducción de las emisiones en un 15%. Además pusieron cifras al peso del sector en la economía española▶ solo la industria cárnica representa el 2,2% del PIB español, ocupa a 97.000 personas y factura 27.957 millones de euros. Fuentes del sector consultadas por ABC pidieron coherencia al Ejecutivo y mayor aprecio hacia un sector tan fundamental como el cárnico.
Por su parte, el presidente de Asaja, Pedro Barato, mostró su «indignación» y tachó de «irresponsables» las palabras del titular de Consumo. «En estas circunstancias, con la actual situación económica y el Covid, España no merece tener un ministro como Garzón», concluyó el representante de la principal organización agraria española.
En un tono similar se expresaron desde UPA, organización que pidió la intervención de Sánchez para que se retire una campaña que calificaron de «engañosa, fraudulenta e irresponsable pues “compra los mensajes” de una parte del ecologismo radical». También el presidente de ATA, Lorenzo Amor, ironizó sobre el tema y aseguró que había consumido «un buen chuletón
de vaca» a la salud de Garzón y como apoyo a los ganaderos. A todos ellos, se unieron las críticas de algunos socialistas, como Emiliano GarcíaPage y Guillermo Fernández Vara.
No es la primera vez que el también líder de Izquierda Unida (IU) choca con el sector primario▶ la implantación del sistema de etiquetado frontal ‘Nutriscore’, que daba muy baja clasificación a alimentos como el jamón serrano, y la campaña ‘el azúcar mata’, enfrentaron a Garzón con los ganaderos o los productores de remolacha. Además de tensar la relación con el ministro de Agricultura Luis Planas, muy crítico con estas medidas.