El fin de los vertidos al mar en la Costa del Sol, más cerca 30 años después
La Junta de Andalucía anunció ayer en Fuengirola que ha licitado los estudios previos para poder redactar el proyecto para el saneamiento integral de la Costa de Sol. Es una demanda de hace 30 años, hasta ahora sólo promesas incumplidas sobre el fin de los vertidos a los ríos de la provincia y, por tanto, a las playas de la misma.
La tubería actual está muy deteriorada, por lo que hay que renovarla, pero además hace falta una obra que va a superar los 200 millones de euros cuando se ejecute. «No se va a poder hacer de una vez. Habrá que hacerla en fases», explicó ayer Patricia Navarro, delegada de la Junta.
En 2001 el Gobierno de España declaró que debía ser urgente, mientras que en 2011 se le cedió la competencia a la comunidad. Golpes de timón que sólo han hecho que contaran los días generando problemas para sectores estratégicos. «Es una asignatura pendiente, que afecta directamente al turismo y a las aguas de baño, que son una carta de presentación en el mundo», dijo Navarro.
Es una obra de gran envargadura, que afecta a una población de 600.000 personas. Lo que se licita es el anteproyecto, que precede al Plan Director de Saneamiento Integral de la Costa del Sol. Ahora se licita una serie de estudios para saber qué trazado debe llevar, cómo se debe hacer, dónde, qué costes o quién tiene competencias, ya que habrá obras que puedan afectar a carreteras o a la línea martímo-terrestre. «Servirá para aclarar, por ejemplo, en qué tramos se va dividir y dónde no», prosiguió Navarro en Fuengirola. Se espera además que la obra permita aligerar las multas que están recibiendo los ayuntamientos por no depurar sus aguas. La Unión Europea ya ha remitido cartas con sanciones por valor de ocho millones de euros a consistorios de toda Andalucía. Por esta razón, sólo en Málaga ha 50 actuaciones urgentes que se van a ir acometiendo con una valor de 125 millones de euros.