Andalucía y Valencia, aliadas para exigir trato justo al Estado
► Ambos consejeros de Hacienda piden ya unos 3.000 millones de fondos extra para compensar la infrafinanciación ►La alianza se extenderá a Murcia y Castilla la Mancha por un reparto equitativo de los recursos públicos
El argumento es contundente «todos los ciudadanos españoles, con independencia de donde vivan, deben tener las mismas oportunidades en la recuperación post-pandemia». Y para lograrlo hace falta que el reparto de los recursos públicos del Estado a las autonomías se rija por criterios de igualdad y equidad que ahora no se cumplen. No se cumplen con el actual modelo de financiación autonómica ni se cumplen en el reparto de los fondos Covid de 2020. Por eso los consejeros de Hacienda de Andalucía y Valencia defienden que ha llegado el momento de reformar el sistema de financiación autonómico buscando criterios que no perjudiquen a nadie. Juan Bravo y Vicent Soler se reunieron ayer en la comunidad valenciana para ir perfilando los acuerdos que los presidentes de ambas autonomías firmarán en el encuentro que celebrarán en septiembre en Sevilla. Un frente común que es insólito hasta la fecha puesto que une a dirigentes de PP ( Juanma Moreno) y PSOE (Ximo Puig) en una negociación política que no se prevé precisamente fácil por las tensiones territoriales, sobre todo de Cataluña pero también del resto de socios nacionalistas del Gobierno de Pedro Sánchez.
Este debate de fondo, la reforma pendiente de la financiación autonómica será arduo y largo, por lo que Andalucía y Valencia se han puesto de acuerdo en reclamar un fondo transitorio de compensación, una partida extraordinaria que palíe los déficits de financiación y ayude a salir de la grave crisis económica provocada por la pandemia. Juan Bravo y Vicent Soler han propuesto al Ministerio de Hacienda que una parte de los 13.486 millones de euros extraordinarios por el Covid para este año 2021 que ha anunciado el Gobierno central, se destine a las cuatro comunidades peor financiadas como nivelación provisional.
900 millones
De estos fondos, a Andalucía le corresponderían entre 800 y 900 millones de euros, superando los mil millones para Valencia. Para Murcia la cuantía sería de unos 280 millones de euros mientras que a Castilla la Mancha deberían llegarles unos 60 millones de euros. Cantidades a las que habría que sumar el reparto proporcional del resto del fondo Covid que se repartiría por población (todavía no está claro si real o ajustada), con lo que Andalucía, al menos, «no saldría perjudicada», en palabras del consejero de Hacienda, Juan Bravo.
Este reparto, que todavía no está decidido aunque el ministerio que dirige la andaluza María Jesús Montero sí ha anunciado que se regirá teniendo en cuenta la población y al PIB de cada comunidad autónoma, se decidirá en una reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera —el órgano de diálogo entre el Gobierno central y las comunidades autónomas— que todavía no tiene fecha de celebración.
La distribución del fondo Covid 2021 difiere del que hizo el Gobierno central con la partida extraordinaria de 16.000 millones que envió en plena pandemia, «las diferencias de recursos de hasta 30 puntos por habitante ajustado impide que afrontemos la recuperación con las mismas oportunidades porque nuestras capacidades financieras son muy dispares», denunciaba el consejero valenciano, el socialista Vicent Soler.
Se trata de que las autonomías peor financiadas hasta ahora puedan encarar la recuperación económica con los recursos necesarios para ello. Sólo así, entienden los responsables de las haciendas públicas de Andalucía y Valencia, será posible que la reconstrucción tras la pandemia no sea a varias velocidades y de forma insolidaria para los distintos territorios.
Más comunidades
Los datos son reveladores, Murcia, Valencia y Andalucía, por ese orden, son las tres comunidades autónomas peor financiadas de España lo que se traduce en que los ciudadanos no puedan recibir los mismos servicios públicos. En situación similar está Cas
En el reparto del fondo Covid 2020 del Gobierno central hubo hasta 30 puntos de diferencias de recursos por habitante
Las dos comunidades piden que la población sea el principal criterio de reparto en el nuevo modelo de financiación autonómica
tilla la Mancha, por lo que la alianza que ayer se estrenó entre Andalucía y Valencia se ampliará a estas comunidades autónomas. El objetivo es llevar una propuesta lo más amplia posible al debate sobre la reforma del sistema de financiación autonómica que el Ejecutivo de Pedro Sánchez todavía no ha abierto.
«Hemos evidenciado la posibilidad de hablar de la reforma del sistema tejiendo complicidades y logrando consensos, puesto que este no es en ningún caso un debate partidista», explicaban Soler y Juan Bravo tras su reunión en valencia.
Todo lo contrario, ambos entienden que se trata de una cuestión de Estado que ponga en el centro a la población ya que los ciudadanos son los beneficiarios de los servicios públicos. En este sentido, ambos consejeros defienden que es necesario «redefinir el concepto de población ajustada, una de las principales cuestiones a consensuar por las comunidades autónomas dado que más del 80% de los recursos del sistema están destinados a las personas, como sucede con la educación, la sanidad o los servicios sociales.
El consejero andaluz de Hacienda explicaba a ABC la importancia de esta voz común frente al Ministerio de Hacienda, «nos hemos fijado en lo que nos une, para tratar de llegar a acuerdos y consensos en un sistema de finaciación que no perjudique a nadie».
Andalucía y Valencia tienen muchos puntos en común ya que consideran que el nuevo modelo de financicación autonómica debe contemplar la suficiencia global del sistema, es decir, que sirva efectivamente para cubrir los servicios que las autonomías prestan a sus ciudadanos. También defienden «la incorporación de solidaridad de las comunidades forales», un asunto bastante espinoso y que hasta ahora se ha obviado en los diferentes modelos de financiación de las autonomías que han aprobado los gobiernos de turno. También coinciden Andalucía y Valencia en la compensación inmediata de la deuda vinculada con la infrafinanciación.
Sin embargo, ninguno de los dos consejeros se decantó por modelos pasados. Es más, Juan Bravo matizó las palabras de su presidente nacional, Pablo Casado, quien pidió volver al modelo implantado en 2002. «Las cosas han cambiado mucho, no es extrapolable pero sí sería deseable sacar un acuerdo como aquel, con el 90%».