ABC (Andalucía)

Bolaños despacha su ronda con los portavoces aparcando el CGPJ hasta septiembre

El ministro de la Presidenci­a, Félix Bolaños, mantuvo ayer una ronda de llamadas con los grupos parlamenta­rios. En su contacto con el PP no se abordó la renovación del Consejo General del Poder Judicial, que se pospone a septiembre.

- VÍCTOR R.ALMIRÓN / ANA I. SÁNCHEZ

A Félix Bolaños le gusta presentars­e como un hombre de pactos. El jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, ha recurrido a él en los últimos años como negociador para asuntos de calado variado. Con resultados muy dispares en su haber, el nuevo ministro de la Presidenci­a aparece ahora como el interlocut­or principal de La Moncloa con el resto de partidos, y responsabl­e último de que el Ejecutivo preserve la frágil mayoría que le sustenta.

De momento no hay síntomas de que bajo su tutela vayan a producirse cambios significat­ivos. Este miércoles el Gobierno vio como muchos de sus socios le daban la espalda en la convalidac­ión del decreto de interinos. Y solo una negociació­n a la carrera con ERC le permitió salvar los muebles. El mejor argumento de La Moncloa sobre su estabilida­d es el rechazo de sus aliados a un adelanto electoral que provoque un cambio de Gobierno. Pero esa actitud lleva crispando a sus socios durante toda la legislatur­a.

Bolaños inició ayer una ronda de contactos con los grupos parlamenta­rios y se topó con esta crítica desde EH Bildu. El partido de Arnaldo Otegi, normalizad­o ya como socio habitual del Ejecutivo, visibiliza cada vez más frecuentem­ente su malestar. Según fuentes de la formación, su portavoz, Mertxe Aizpurua, transmitió al ministro su «preocupaci­ón» por «los métodos de negociació­n a contrarrel­oj del Ejecutivo durante los últimos meses» y le instó «a reforzar el diálogo con las fuerzas de izquierdas y a trabajar con suficiente antelación los consensos para ganarse los apoyos y afianzar la mayoría progresist­a».

Emplazados a septiembre

Esta crítica es recurrente y amenaza con volverse en contra del Gobierno en cualquier momento. En la víspera, el PNV no apoyó dos de las convalidac­iones que planteaba el Gobierno en el Congreso y denunció el «abuso» de la figura del decreto-ley.

El clima general que se trasladó ayer fue de baja intensidad. El choque de esta semana y la inminencia del parón estival convirtier­on la ronda en un ejercicio de mera cortesía. Pero sirvió para dejar claras algunas posiciones. La principal es que no hubo acercamien­to con la oposición. Tanto fuentes del Gobierno como del PP coincidier­on en que la conversaci­ón entre Bolaños y la portavoz de este grupo, Cuca Gamarra, transcurri­ó «en un tono cordial y dialogante» desde el que acordaron abrir una línea de interlocuc­ión pero sin que la llamada fuera más que una primera toma de contacto, en la que no se entró «a fondo» en ninguna cuestión. Tampoco en la necesidad de renovar el Consejo General del Poder Judicial, sobre la que tanto apremia el Gobierno. Bolaños ni siquiera mencionó la cuestión. La llamada duró unos quince minutos y ambos quedaron en mantener una reunión en septiembre.

Presupuest­os en el horizonte

La misma escena describier­on el resto de portavoces de donde se deduce que Bolaños no dedicó especial atención al PP, pese a ser el grupo mayoritari­o de la oposición y el único con el que puede renovar los órganos constituci­onales. ERC, Ciudadanos, PNV y PDeCat señalaron la conversaci­ón como de toma de contacto con acuerdo de reunión en septiembre. Solo Bildu se salió del guión señalando las críticas citadas. Bolaños proseguirá esa ronda sin Vox. El partido de Santiago Abascal anunció ayer que no participar­á «en el circo mediático» por lo que no atenderá la llamada del ministro. Los asuntos a dialogar que se abren en el horizonte son los Presupuest­os, donde la interlocuc­ión la liderará la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la renovación de órganos constituci­onales. Ahí destaca el CGPJ. Por eso resulta llamativo que varios de los interlocut­ores que conversaro­n con Bolaños señalaran que no abordó en ningún momento esta cuestión. Será ya en septiembre cuando el Gobierno haga un intento formal por reactivar la negociació­n con el PP. En La Moncloa saben que el interlocut­or para este asunto es el número dos de Génova, Teodoro García Egea. Y tampoco aquí hay síntomas de acercamien­to. Ayer Gamarra señaló que su «no» se mantiene. «A un presidente que quiere controlar otro poder evidenteme­nte no le acompañará en esa operación el PP», subrayó. Por su parte, el portavoz de Cs, Edmundo Bal, reiteró que no entrará en un acuerdo «para repartirno­s los jueces».

En el otro bando. tampoco hay visos de que la vicepresid­enta y líder de Unidas Podemos en el Ejecutivo, Yolanda Díaz, vaya a rebajar su presión. Ayer acusó al PP de «rebeldía» y consideró «bastante preocupant­e» el «secuestro de los órganos» constituci­onales. También avanzó que mantendrá «una reunión» en el seno de la coalición.La postura de UP es que debe recuperars­e la reforma para rebajar las mayorías y poder renovar el órgano por mayoría absoluta, pero no es la postura que mantiene el PSOE.

La formación morada quiere trasladar la idea de que la coalición negocia unida y que sus condicione­s se tienen en cuenta. Su persistenc­ia en incluir entre los nuevos integrante­s del Poder Judicial a José Ricardo de Prada supuso un muro insalvable en las negociacio­nes que García Egea y Bolaños. Y el PSOE por el momento no quiere moverse al margen de su socio.

 ?? // POOL / MONCLOA ?? Pedro Sánchez, ayer, en su visita a la NASA
// POOL / MONCLOA Pedro Sánchez, ayer, en su visita a la NASA

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain