ABC (Andalucía)

Andaluz tonto, catalán listo

El federalism­o de sal gorda de Sánchez utiliza los tópicos más maniqueos como coartada nepotista

- ALBERTO GARCÍA REYES

E Landaluz es folclórico, concretame­nte folclórico de Triana o del Sacromonte aunque haya nacido en Pulpí, casi Murcia, o en Ayamonte, casi Portugal. Es vago, pícaro, bandolero, inculto, pueblerino, se echa todos los días la siesta, juega al dominó con un palillo de dientes entre los labios y un pitillo de Ducados en la oreja mientras cobra alguna paguita, no sabe hablar bien –Lorca ceceaba, qué burro–, se desplaza a caballo y sale los domingos a pasear su embrujo vestido de luces él y de faralaes ella. No importa que la palabra faralaes no la digan en Andalucía ni los guías turísticos.

El catalán es emprendedo­r, rácano pero próspero, de gran ciudad, se alimenta de pan tumaca y calçots por vocación identitari­a, es inteligent­e por castigo, creativo, snob y, en definitiva, tiene el cromosoma de la superiorid­ad, especialme­nte sobre los españoles de cualquier otra región.

Esta es la esencia del tópico ibérico el Norte es el futuro innovador gracias a su supremacía histórica, guardiana de tradicione­s únicas, y el Sur es el pasado costumbris­ta anclado en sus atavismos anacrónico­s, lastre para el desarrollo. Y en ese tablero está jugando Sánchez al federalism­o de sal gorda con su España de arriba y abajo. No se trata de la brecha económica, que es un vestigio franquista, origen del desequilib­rio en las inversione­s territoria­les. Sorprender­ía dar un repaso a la lista de planes del caudillo que hoy apadrinan sus exhumadore­s, pero ese es otro tema. El nudo gordiano está en la brecha cultural, pretexto para las desigualda­des cimentado en arquetipos, en abstraccio­nes que construyen grandes mentiras utilizando medias verdades. El patriarca Pujol escribió en su juventud que el andaluz lleva cientos de años pasando hambre y vive en un estado de ignorancia y de miseria espiritual. Pero ahora la Andalucía agraviada en los presupuest­os generales, atrapada durante décadas en la almadraba clientelar del PSOE, ha adelantado en creación de empresas a la Cataluña subvencion­ada. Las estadístic­as demuestran que el español más subsidiado es el catalán, que recibe las mayores partidas estatales para redes ferroviari­as, puentes, carreteras... La ampliación del aeropuerto de El Prat es sólo un ejemplo más. Porque el truco ha consistido siempre en acusar a los demás de preferir el pescado mientras ellos se quedaban con todas las cañas de pescar. El privilegio de Cataluña y el País Vasco frente al resto de comunidade­s ha manoseado la coartada de la capacidad productiva de cada territorio, idea de la que emana el lema ‘Espanya ens roba’. Pero eso también es un tópico más grande que un ‘castell’ que le viene a Sánchez de perlas para poder seguir aplicando su nepotismo con quienes le sustentan. Pujol fue en realidad un visionario cuando escribió esta maravilla sobre el andaluz «Si por la fuerza del número llegase a dominar, destruiría Cataluña». Ánimo, estimados independen­tistas. Ya son mejores los números de la Andalucía de la miseria espiritual que los de la tierra elegida para la superiorid­ad genética. Y sin dejar de dormir la siesta.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain