Génova cree que ha doblado los votos en tres años y rozaría ya los siete millones
El optimismo se ha instalado en el núcleo duro de Génova, sobre todo después de comprobar cómo Sánchez no lograba revertir las encuestas pese a mover algunas de las fichas más simbólicas de su Gobierno a mediados de julio. En un informe interno, realizado tras el análisis de encuestas y estudios propios, los populares concluyen que el cambio de ciclo en España es ya imparable e indiscutible.
Cada encuesta publicada es una inyección de ánimo en las filas populares. «El sanchismo está agotado, la gente no puede más», sostienen en el equipo de Casado. Según los análisis que han hecho, en el primer semestre de 2018, el último con Mariano Rajoy al frente del PP y que acabó de forma abrupta con la moción de censura de Sánchez, y más en concreto entre abril y junio, los populares estaban en una media del 17 por ciento de estimación de voto en las encuestas, en tercera posición detrás de Ciudadanos y el PSOE. Con una participación que rondaba el 60 por ciento, según los sondeos, el PP sumaba entonces una estimación de alrededor de 3,8 millones de votos. Un desastre absoluto, si se tiene en cuenta que en 2011 ganó en las urnas por mayoría absoluta con casi 11 millones de votos. En los comicios de 2015 cayó a 7,2 millones, y en la repetición electoral de junio de 2016 subió hasta los 7,9 millones de votos.
En el núcleo duro del PP argumentan que Pablo Casado tomó las riendas del partido, en el verano de 2018, en un momento muy delicado, con solo un tercio de los apoyos que obtuvo Rajoy en 2011, y prácticamente la mitad de los que registró el PP en las últimas generales. Por si fuera poco, el ‘sorpasso’ de Ciudadanos era un hecho en algunas encuestas.
Ahora, tres años después, y con un cambio de tendencia que parece consolidado según la mayoría de los sondeos, el PP tendría una estimación de voto por encima del 28 por ciento, 10 puntos más que en algunas encuestas de 2018. Un dato que supondría casi el doble de voto, hasta los 6,9 millones.
Renovación territorial
La subida del PP se produce en pleno proceso de renovación territorial, cuando ya se han culminado la mayoría de congresos provinciales y tres regionales, en Galicia, Baleares y Comunidad Valenciana. Por delante queda el resto de congresos autonómicos y alguno clave como el de Madrid. Allí, Casado quiere asegurarse el ‘éxito’ con un mensaje de fortaleza y unidad, a pesar de la guerra interna que se vive en el PP madrileño, más soterrada que pública, para controlar un partido dirigido por una gestora desde 2018.
El congreso nacional está previsto para julio de 2022. Fuentes populares creen que Casado cumplirá la fecha prevista, para ser reelegido presidente del PP. El aparato de Génova quiere llegar a esa cita con el partido renovado y sin tensiones internas.