Educación quiere que los niños aprendan por qué se «persiguió y sacrificó» a las brujas
El Ministerio de Educación envió a las comunidades los borradores de los reales decretos de enseñanzas mínimas que desarrollan la ‘ley Celaá’, es decir, los que establecen qué se enseñará en cada asignatura y que serán completados por las autonomías.
Dichos borradores usan una terminología farragosa que diferencian entre «competencias», «competencias específicas», «saberes», «situaciones de aprendizaje», etc. Las situaciones de aprendizaje son, dicho de otro modo, ejemplos prácticos que propone el Ministerio para abordar las asignaturas en clase. Así, para el caso de primer ciclo de Primaria se propone elaborar un libro de cuentos de brujas «por ser estas un personaje prototípico de la literatura y ayuda a desmitificar las ideas preconcebidas acerca de los prejuicios sobre estos personajes», señala el borrador al que ha tenido acceso ABC.
El Ministerio propone, en primer lugar, iniciar una fase de lectura de textos literarios cuyas protagonistas sean las brujas para reflexionar sobre descricpiones físicas, psicológicas, elementos mágicos, etc. También se promueve beneficiar la riqueza léxica a través del uso de adjetivos, situar el espacio y el tiempo, y usar diferentes fuentes para escribir los borradores del texto, describe la propuesta del ministerio mientras que, «de forma paralela,
se investiga sobre la realidad de las brujas a lo largo de la historia, las más conocidas y los motivos por los que se las persiguió y sacrificó tan injustamente», señala la propuesta de Educación.
El uso de este tipo de ejemplos en el aula es visto con algo de recelo por algunos expertos: «Cuando se proponen ejemplos de situaciones para tratar diferentes contenidos hay que ser objetivos. Usar el tema de las brujas con niños de 5-6 años para concluir por qué se las ‘persiguió y sacrificó tan injustamente’ puede plantear dudas sobre su conveniencia y la imagen de una institución como es la Iglesia, a lo largo de la Historia. ¿Este ejemplo es casual o está en línea con la perspectiva de género y una crítica histórica a la Iglesia?», señala Luis Centeno, secretario general adjunto de Escuelas Católicas. Desde hace años, existe un creciente interés en sectores progresistas y feministas españoles por unirse a los países europeos que están recuperando la memoria de las miles de mujeres que fueron ejecutadas entre los siglos XV y XVII acusadas de brujas.
Dialectos del castellano
El feminismo español ha dado por supuesto que en su fanático y violento país, que dice la Leyenda negra, también se produjo este fenómeno, pero la realidad de España, donde la persecución de brujas apenas tuvo peso, contradice este discurso, informa César Cervera.
Los contenidos de los currículos de Primaria que, por otro lado, determinan el significado de ‘bueno’ y ‘malo’ han sido rechazados por parte de la comunidad educativa: «La ideología y el adoctrinaiento tienen que estar fuera de las aulas; la educación tiene que ser lo más neutral posible», criticó Pedro José Caballero, presidente de la Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y padres de Alumnos (Concapa). El currículo también promueve los diferentes dialectos del castellano, algo criticado por la presidenta de la Asamblea por una Escuela Bilingüe, Ana Losada: «Me sorprende que hablen del saber básico de la diversidad lingüística cuando muchos de los alumnos que estudian en comunidades bilingües tendrán únicamente dos horas a la semana de lengua castellana y no utilizarán está lengua para aprender otros saberes».