La inteligencia artificial predecirá la próxima pandemia
La OMS inaugura en Berlín un centro para estar prevenidos ante futuras infecciones
Esta pandemia nos pilló desprevenidos y los gobiernos se sirvieron de recursos medievales, como los confinamientos y perimetrajes, para intentar atajar los contagios. Pero para la próxima estaremos mejor preparados. Con este objetivo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) inauguró ayer en Berlín un Centro de Inteligencia contra Pandemias que aplicará la inteligencia artificial y los algoritmos a la predicción y a la gestión de futuros problemas sanitarios. Como proyecto conjunto con el Gobierno alemán, el centro estará ubicado en la Plaza Moritzplatz de Berlín y estará «destinado a cubrir las deficiencias en los sistemas globales de información sobre pandemias y epidemias», según el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
«Los virus se mueven rápido. Pero los datos pueden moverse incluso más rápido», dijo el responsable de la agencia sanitaria de la ONU. Es la idea sobre la que se basa el funcionamiento del centro.
La inteligencia artificial ha cumplido un papel crucial en el análisis de la información genética del virus SARSCoV-2 y su ADN, lo que ha permitido el desarrollo de las vacunas en tiempo récord. También ha permitido entender las mutaciones del virus y, por tanto, estar advertidos a tiempo de su mayor mortalidad.
Aplicaciones del algoritmo
Fundamentalmente, el citado centro de la OMS apoyará el trabajo de los especialistas en Salud Pública y los responsables políticos de todos los países con conocimientos para que puedan tomar decisiones rápidas para prevenir y responder a futuras emergencias de Salud Pública, partiendo de los importantes logros de esta tecnología aplicada al coronavirus. Los algoritmos se han utilizado, por ejemplo en Nigeria, en herramientas de diagnóstico que leen un gran número de radiografías de tórax más rápido que cualquier radiólogo. Eso ayudó a los médicos locales a identificar y controlar pacientes con Covid-19.
En Sudáfrica, los investigadores utilizaron un algoritmo para predecir los futuros casos diarios confirmados, basándose en los datos del historial de infecciones anteriores cruzados con tendencias sobre desplazamientos. Y cuando el resto del mundo aún se preguntaba si había llegado el momento de aplicar el primer confinamiento, una empresa de Seúl utilizó la inteligencia artificial para desarrollar un test en apenas unas semanas, un instrumento que sirvió a Corea del Sur para mantener las infecciones a raya durante meses.
Basándose en estos ejemplos y a partir de una base de datos compartida cuya procedencia y cuyas condiciones de seguridad y protección no han sido todavía especificadas públicamente, el centro creará sistemas de alerta temprana y protocolos para reaccionar a todo tipo de brotes que surjan en cualquier punto del globo.
«Las redes jugarán un papel muy importante, la capacidad de reunir y procesar datos hará la diferencia», señaló la canciller Merkel, madrina del proyecto. «Necesitamos identificar los riesgos de una pandemia lo más rápido posible, dondequiera que ocurran. Para ese objetivo, necesitamos fortalecer el sistema global de vigilancia de alerta temprana con una mejor recopilación de datos relacionados con la salud y análisis de riesgo interdisciplinario», describió el ministro de Sanidad alemán, Jens Spahn, que hizo una llamada a China a participar en el proyecto. «El mundo necesita un avance significativo en el análisis de datos para ayudar a los líderes a tomar decisiones informadas sobre Salud Pública», añadió Tedros Adhanom Ghebreyesus.
El Gobierno alemán ha inyectado cien millones de dólares en el centro, que estará dirigido por Chikwe Ihekweazu, el actual director general del Centro de Nigeria para el Control de Enfermedades.
Su trabajo consistirá en aprovechar las innovaciones en ciencia de datos para la vigilancia y la respuesta de la salud pública y la creación de sistemas mediante los cuales se pueda compartir y expandir la experiencia en este área a nivel mundial.
Identificar nuevos riesgos
«Cuanto más rápido identifiquemos nuevos riesgos de enfermedades infecciosas, más rápido podremos responder», insistió Mike Ryan, jefe de emergencias sanitarias de la OMS. «Nada de esto es posible sin los mejores datos, análisis e información».
La OMS ya tiene una relación muy estrecha con el Instituto Robert Koch (RKI), la principal organización de epidemiología y salud pública de Alemania y que asesora a países de todo el mundo. Es el ‘centro colaborador’ de la OMS para las infecciones emergentes y las amenazas biológicas. Juntos han desarrollado procesos de alerta y respuesta a brotes mundiales, hepatitis viral y VIH. El lanzamiento del nuevo centro h asido acompañado, de hecho, por un nuevo memorando de entendimiento entre la OMS y el Instituto Robert Koch. «Los científicos de RKI trabajarán junto con los principales expertos de la OMS y otros socios globales aquí en Berlín para predecir, prevenir, detectar, prepararse y responder mejor a las amenazas a la salud en todo el mundo», se felicitó Ryan.
El hospital universitario Charité de Berlín, uno de los más prestigiosos de Europa y con un destacado departamento de epidemiología, participa también en esta colaboración.
«El mundo necesita un avance en análisis de datos para ayudar a los líderes a tomar decisiones óptimas sobre Salud Pública»