Jamie Lee-Curtis, León de Oro en Venecia por su trayectoria
«Estoy en el momento más creativo de mi vida», dijo la actriz estadounidense
No abundan los hijos de celebridades que logran construir una carrera en el mundo del entretenimiento independientemente de sus famosos padres. Jamie Lee Curtis es quizás uno de esos raros ejemplos. La hija de Janet Leigh y Tony Curtis ha conseguido la hazaña de hacerse de un lugar en cine, en primer lugar, y después de mantenerse presente de una u otra manera a lo largo de más de cuatro décadas. Precisamente por esa infinidad de roles interpretados en todos los géneros cinematográficos, identificables para varias generaciones, la Bienal de Venecia le ha concedido el León de Oro honorífico a su carrera artística. Cuando la actriz se enteró de tal reconocimiento hace unos meses, primero se sorprendió agradecida y luego cayó en cuenta de que no era tan mayor como para tal agasajo. Le llevó, confiesa, algo de tiempo para asumirlo.
Que le premien por su carrera lo ve como que el cierre de un ciclo, el final de la vida. Jamie no está en ese momento. «Estoy en el momento más creativo de mi vida», dijo en el encuentro con la prensa internacional horas antes de la gala. Alta, espigada, cabello cortísimo y platinado, llegó con unas llamativas gafas oscuras del estilo de Peggy Guggenheim –«las llevo en su honor», dijo–. Bajo el brazo trae a Venecia ‘Halloween Kills’, la primera parte de la trilogía dirigida por David Gordon-Green y en la que una vez más Jamie Lee Curtis encarna a Laurie Strode. «Laurie y Jamie es la misma cosa», dijo mientras recorría con la mirada la sala llena (al 50% de capacidad permitida) como una experta oradora y una mujer que indudablemente nació para entretener. «Después de 43 años me puedes llamar Laurie o Jamie».
En 1978 John Carpenter, le ofreció ese personaje al que está encantada de retornar cada cierto tiempo, un hecho que la intérprete lo tilda de fuera de lo común. «Lo más emocionante de ser actriz y trabajar con un mismo rol, es que hemos cambiado, y es que la belleza de la condición humana radica en la capacidad de transformarnos, de avanzar», describió.
Reina del terror
Aunque a Jamie Lee Curtis se le vea en diferentes géneros, sin dudas es uno de los rostros del cine de terror. Desde Venecia da un salto en el tiempo y recuerda que «el movimiento feminista me odiaba por mi trabajo en películas de terror, ahora adorarían a Laurie Strode▶ su fuerza, su habilidad para enfrentar las adversidades... Sin embargo, en aquel entonces era considerada antifeminista». La actriz se reconoció como asustadiza. «Si buscáis fotos mías cuando era niña siempre parece que estaba aterrorizada –puso una mueca de espanto generando carcajadas–, incluso cuando era una bebe; si no me creéis, voy a subir una foto de esas en las redes sociales para que lo comprobéis». Recordó que carece de formación formal en la interpretación, y por eso tiene la certeza de que el secreto del éxito de ese rol tan representativo radica, además en su condición de miedosa, en el hecho de tener «muchos traumas; vi muchas cosas feas en mi vida, por eso todo lo que me sale viene desde lo vivido», se sinceró.