Marc Márquez se reivindica en Aragón
Aleja todos sus fantasmas, aunque cede en un precioso final ante Bagnaia
«Hay mucho boquerón desinformado hablando. Eso forma parte del show y de este mundo, al final un piloto tiene que seguir con la suya, como hago yo, de que no le afecte nada, y así lo hago». Palabras de rabia y desahogo de Marc Márquez tras una carrera espectacular en Motorland en la que únicamente el excelente pilotaje de Bagnaia pudo impedir la segunda victoria de la temporada del catalán tras la lograda en Sachsenring a mediados de junio. Márquez se expulsó todos los fantasmas con una excelente salida que le sirvió para colocarse en segundo lugar y demostrar que, por fin, tiene domada a su Honda y que sus problemas en el brazo empiezan a ser un lejano recuerdo. «Vengo de dos carreras consecutivas cayéndome, caí el viernes y el sábado, no está siendo una temporada fácil», aseguraba tras cuatro últimos giros de infarto en el que puso a prueba los nervios de Pecco, que obtuvo en Motorland el premio a su progresión con la pole y el triunfo final. Marc ya está muy cerca de ser Márquez.
Primer triunfo en la categoría reina para el de Ducati (qué mejor manera de estrenarse que ante el octocampeón y en un final no apto para cardiacos), que le recortó un buen puñado de puntos a Fabio Quartararo, al que se le atraganta correr en Aragón. El francés sigue líder del Mundial tras su octava posición, aunque evidenció algunas carencias en su Yamaha y dio alas a sus inmediatos perseguidores. De todas formas, la distancia es considerable y, a falta de cinco carreras, mucho se tendrían que torcer las cosas para que los 53 puntos de rédito que tiene no sean aval suficiente para que se corone como nuevo campeón del mundo, sucediendo a Joan Mir, que completó el podio tras un error de Miller mediada la carrera. «No lo considero un desastre, sino algo diferente», se conformaba Quartararo, que sufrió para sumar esos ocho puntos acosado por Jorge Martín.
La épica de Raúl Fernández
«Hay mucho boquerón desinformado hablando pero no me afecta nada», asegura el español tras un vibrante final de carrera
Si agónica fue la victoria de Bagnaia y meritoria la carrera de Márquez, el triunfo e Raúl Fernández en Moto2 merece el calificativo de épico. El madrileño encabezó el cajón con un dedo roto, la mano metida en hielo y una semana después de pasar por el quirófano. «Me ha resultado muy difícil. Estoy muy contento. No podía aguantar más el dolor al final, no podía frenar en las últimas cinco vueltas», se emocionaba el piloto de KTM. Fue su quinta victoria del año y se quedó a 39 puntos de Gardner.
En Moto3 venció Denis Foggia por delante de Denis Oncu y Ayumu Sasaki. Pedro Acosta y Sergio García Dols, que ocupan los dos primeros puestos en el Mundial, se fueron al suelo. Fue la primera vez que no subió ningún piloto español en el podio de Motorland en la categoría.